Page 43 - RC_1968_09_N96

This is a SEO version of RC_1968_09_N96. Click here to view full version

« Previous Page Table of Contents Next Page »

· La verdad es que aquellos hombres trabajaron en fume para preparar el terreno y sembraron su semilla.

Luego agregalon a diario y limpiaron -de sol ~l 501–

d~ malezas y escorias su plantío. y en hora oportuna. ".cndo maduro el fruto, se aprestaron a cortarlo legán– donos una heredad propia y una semilla pletórica de

vida y de promesas.

CARLOS GANDARA DURAN NUESTROS I\fARTIJl,ES

La independencia Se preparó a través de una lu cha conjunta de los espíritus más valerosos y visto– neros de cada parcela istmeña.

Cuando el investigador analiza los hechos que de~

terminaron nuestra nacionalidad, comprueba que es

innegable que el gran suceso del 15 de Septiembre de

1821. o sea la proclamación de la independencia. trans–

currió en paz. sin que se alterara el orden sustan–

O:ialmente Empero, esa independencia habia sido lora jada por los hombres que en el curso de las últimas décadas del período eolonial divulgaron las Ideas inde. pendientistas; y lo hicieron 'Yali~ndose de distintos me· dios, desde los más atrevidos como lo eran las a· biedas conspiradones y las publicaciones de la preOa

S8, hasta aqueÚos en que la ingenuidad de lo que se

planeaba y proponia brindó la ocasión para qne los 8Oplones acudieran a las autoridades cnn sus dennna cias para ganar méritos ante Jos poderosos.

Muchos fueron los patriotas que sucumbieron por

SU! idealt:S de libertad. Y no obstante que aún nos talta bastante que conocer por docwnentos que se per· dieron o que bien fueron destruidos

l

nuestra historia es abundante en los datos que describen el' esfuerzo

de los centroamericanos en pro de la emancipapión de España, 3J'í como la firmeza de sus anhelos por ver realizados sus sueños. La fe jnquebrantable de tantos

y tantos varones aparece radiante en las páginas de los documentos que el investigador consulta en sus a· fanes de interpretarlos.

Esos documentos prueban. sin lugar a dudas, que

hubo mártires, que fueron muchas las víctimas de las persecusiones Y por ello" los centroantericanos esta~

mos obligados a mencionar sus nombres con el más profundo respetD, siendo esa la mejor forma de exal_ tar la memoria de quienes lucharon por la libertad en su afán de llegar a sus descendientes una patria dig~

na de respeto fuerte, y grande.

Ya en esta hora parece indudable que las aecio–

ne~ decisivas en favor de la independencia de la Amé–

rica Central se iniciaron en el ano 1808, precisamente en esta ciudad, sede de la Capitanía General. Y esas acciones las inició un poeta y profundo pensador ori g:i.nalio de Escuilltla. cuyo nombre era Simón Ber– gaño y Villegas El juicio que se siguió en su contra y que forma parte del tesoro que guarda nuesh o Ar· chivo General de lª Nación expresa en su calátula:

-'RC5:el vado Criminales Indifelente 1868. No. 171 (tes– tado) 74 Sobre averiguar la conducta de Don Simón

Villegas al punto al estado de insurrección que se re– cela en esta Capital. Dtor M. Larreynaga. Essno Cal~

Vo. El juicio climinal está compuesta de 30 hojas, y

se cierra con los siguientes conceptos: "Y lo fn mo

espresando haber procedido fiel y legalmente Sea

gún su inteligencia (le que doy fe. Miguel Larreynaga, Calvo".

El proceso informa que en un motin de al tesanos en que se pitó "Abajo los chapetones y viva Gua–

temala libre!", Se sugirió la organización de una Jun·

ta de Gobierno en la que deberían figurar sólo erIoa llos Es indudable que cuando se hab16 de la forma· ción de esa Junta pesaba en el ánimo de la mayoría

de artesanos del barrio de San Sebastián el ruda trato que recibían en 10 relativo a los tributos aplicados a

tus düíciles y' pobres faenas Además, no estaban con· formes con que se .hubiera dejado libre de impuestos la importaoión de telas

El hecho tuvo gran resonancia en la apacible ca–

lI'ital del Reino y, como consecuencia

J

cundió la alara ma, acusándose a Bergalio '1 Villegls de ser el pro·

moto," pl"incipal de la acción subversiva promovida dena tro del gremio de artesanos. También se señaló al bar.

berC? Agustín Vilches como principal agitador en el motln.

Pocos meses después, el 6 de mayo de 1809. y ca·

mo resonancia de la asonada de los artesanos. fue so– metido a proceso el barbero de color Agustín Vilches, a quien se le acusó y juzgó" por indicios de andar pro. pagando especies de subversión". En la denuncia que aparece en el proceso qoe se.. le entablara están estam~

pados los conceptos inSuflados por la satisfacción del

secre~alÍo del Tribunal, José Joaquín Calvo. Dice: (IPor Una prodigiosa casualidad he sabido ayer de per– sonas fidedigna que Agustín Vilches, negro de este vecindario y de oficio peluquero se ha empleado estos días a visitar las tiendas de los artesanos tomando de

oficIo el persuadirles ser falsa la Instalación de la

supma. Junta Soberana Nacional, negando por canse. quencias su alta dignidad y disposiciones que estanllo la PenfnsuJa ranalla por Jos franceses

l

estos han de gobernar las Américas y ser obedecidos por sos babi..

tai!tes y que los españoles que son conocidos en el

palS COn el nombre chapetones deben en virtud de eso desocuparlo inmediataDIeJlte'.

En el proceso aparece la declaración de un acaU~

dalado comerciante de la capital, don J9sé Urruela quien dijo que el enjuiciado era una especie de líde; entre el pueblo de las bardadas. Otro declarante ex.

puso ante la audiencia que VlIches propagaba que los

días del coloniaje estaban tontados, y que dentro de poco tiempo Guatemala y México formarian parte del imperJo francés.

Agustín Vilches fue de inmediato incomunicad. en las cárceles. y permaneció en presidio hasta el año

1810 Padeció por sus anhelos de ver a Guatemala li–

bre En abril de 1811 fue procesado Encarnación Va. lIadares 'por haber intentado sublevar en Chinandega las miliCIas de 1;), localidad Sel le sometió a Un drásti– co interrogatorio, y finalmente fue enviado en calidad de reo sedicioso al castillo de San Carlos donde per– maneció hasta el año 1814.

En el mes de julio de 1811, Martín Tones veci– no de Dolores, Izalco, fne denunciado como cabecilla de una intentona revolucionaria contra las autorilla. des de la colonia. Se observa en el proceso que se le instruyó. el afán de condenarlo a toda costa Fue re-mitido a las cárceles de San Salvador .

y comprobamos al examinar esa clase de aecio. n.es, que indudablemente e~ movimiento indepen. ttsta de maYOres alcances l'egistrado en el período co– lonial fUe el éjecutado el S de noviembre de 1811 en

la ciudad de San Salvador. toda vez; que por su mag. lIitud y t.rascendencia influyó decisivamente para que otros pueblos del área centroamerican siguielon el e–

jemplo de los patriotas de San Salva(lor.

Aquel 5 de noviembre de 1811 estalló el 1tt00vimien. to levolucionado. Palte de la versión tradicional de los sucesos de eSe día la da el doctor Víctor Jerez en su discurso de la fecha centenaria de aquel suceso como sigue: "Era el 5 de noviembre de 1811 El padr~

Delgado, con patriótica Jmpaciencia, sustituyó al en– calgado de dar la señal que esperaban lo:s conspira– dores. Inmediatamente, sonoras y jubilosas. responden las campanas de las otras iglesias, disparos de cohetes se oyen en todas dh ecciones y suenan descargas de fusilería hacía el sur y oriente. El pueblo salva(loreño con inmenso heroísmo, cerró el per~odo colonial al JIa~

mamiento (lel padre Delgado, qUe!" desde aqurJ- campa. nario saludó Con alborozo el nacimiento de la patria.

A las ocho de la mañana de ese día, después que los levolucionrios redujelon a prisión a las autolidades pe ninsulares, el prócer don Manuel José) Arce en la cs–

quina del Cabildo de San Salvador, sil"viénd~le de !Ji–

blma una mesa de la alcaldía, proclamó la Indepen– dencia Nacional".

Las manifestaciones de júbilo por los SUcesos de esa fecha fueron ilimitados en la ciudad HA eso del medio día se celebró un Te Deum en la Iglesia Pa– rroquial de la ciudad. para agradecer al Altísimo el

40

Page 43 - RC_1968_09_N96

This is a SEO version of RC_1968_09_N96. Click here to view full version

« Previous Page Table of Contents Next Page »