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que se le aprehen:dieron al Virey D. Juan Sámanos, hallé que una fuerza superior, bien organizada y puesta en disciplina, era el muro en que se inieniaba que viniege El esfrellarse el valiente ejércifo liberia– dar

"Yo calculaba, sin embargo, que la imagen de fanfos males, con que esfos pueblos habian sido, y aun eran afligidos, habría preparado el espírifu de ellos para abrazar con gusfo a sus heroicos defenso– res y a. la verdad, apenas dí xnis primeros pasos de este lo.do de la Cordillera, que divide el llano de los ferrenos quebrados, limiliofe!! con la provincia de Casanare, cuando oí resonar delanie de mi las bendiciones de unos hombres, que esperaban xnis armas con fodo el entusiasmo de la libertad, como un remedio a las calamidades e infortunios que les habían llevado hasfa el úlfimo punio de exaspera– ción

"Un Jefe experto, al frenfe de un ejércifo de cul'rlro a cinco xnil guerreros, es lo primero que se me presenfa en el campo de batalla.-El General D. Jo!'.é María Barreyro, encargado de su dirección, apura sus esfuerzos: mueve iodos los reSOrles del valor, y él me ha preseniado acciones, que fallaban

a la República para el lleno de sus glorias.

"La disciplina de sus fropas, su buena organi– zación, las veniajosas posiciones que ocupaba, y la mulfifud de recursos que oporlunamenfe se habian proporcionado, zne hizo creer, que esfa empresa so– lo era propia de la infrepidez y denuedo de las armas de la República.

"La jornada de Boyacá, la más complefa vicio– ria que acabo de obtener, h~ deciciído ¡a suerte de estos habitantes, y después de haber desinridc:l, has–

que a porfía nos prodigaban las expresiones de la más flema grafifw:~, y ¡)recipifándose entre las parti– das dispersas de los enexnigos, no hacian caso de su propia indefensi6n, por cooperar aclivaznenie a su absoluto exterminio, foznando las armas, y haciendo un gran número de prisioneros. Los pormenores de esfe :íriunfo los hallará V.S. oonsignados en los im– presos que rexnifo adjunios.

¡'No poco se ha conmovido xni sensibilidad al llegar a esta Capifal de la Nueva Granada, en donde fodavía se ven marcadas la depravaci6n y la cruel-dad de los prosé1i±os de la Península. .

a la mayor parie de los Españoles, y al resto de las fuerzas que le quedaron, sali6 precipifadaznente de fugilivo, a la primera noticia que tuvo de la úl±ima vicioria, y anles de xni llegada a esia Capifal, hice marchar algunas divisiones hacia el sur y occidenie de ella, que, que es la rufa que han fomado, con la fundada esperanza de aprehender a ellos, y a una nUlT\erosa exnigración.

lnillón de pesos en znefálico, fuera de la ouantiosa SUlna, que producirán las propiedades de los opre– sores y m.al contenios fugilivos.

"Yo trabajo con actividad en el arreglo de su econom.ía interior, y las bellas disposiciones de esfos pueblos, en donde apenas se cuenta un enexnigo, me

hace~ presentir, que el poder de los tiranos quedará confundido en ia nada.

"Reciba V E. Y toda la República xnis tiernas felicilaciones, y los sinceros vofos del ilusfre pueblo Granadino, que solo aspira a una felicidad c:oznún, dignándose igualmenie presenfar los friunfos de las annas de zni mando ai Supremo Congreso, como un .. .

clales del Señor Marqués de la Puerta, y Conde de Carfagena, el pobre sargenf6n Pablo Morillo, que se ha visto converlido en Conde y Marqués, por Iilolo haber degollado sin frufo a doscienios mil America– nos? En verdad, que no podía su amo de V. hacer un Conde más condenable que esfe, y si Morillo ha llegado a condenarse por haber hecho más odioso que nunca el nombre español en América, V. puede lisonjearse de que no recibirá menor prexnio por ha– bet

O malfrafado en su Observador a foda la ruin cla– se de los criollos. yyea- oau

Espero que en el número fer<;ero nos hablará V. algo sobre las noticias, que ha llevado a Cádiz el

ines Don J R.. de A ¡Como se engañan los edifo– res de papeles públicos, cuando tienen la b~ndad de recibir noticias de persc:mas tan imparciales e ilus– frEldas, como Don J. R. de A.I Si, Señor Observador, es falso, fal~ísimo, que a Lima hubiese llegado regi– mienfo aiguno de Morillo, pl-les ya lo tomarla él para sí No es menos absurdo el cuento, de que en Lim!! se pensaba en expedici6n para ofra parte. Lo que no fiene duda es, que en julio úlfimo estaban ya las fropas chilenas dirigiéndose a Valparaiso; para ir a festejar al Exczno. Señor Don Joaquin de Pe%Uela. Pronto fendrelT\os el resultado, y enfre fanio, yo me repito de V. afecfísimo amigo, servidor, y capellán

. O.S.M.B.

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