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c:aragua puedo ci:l:ar "Oeomefna Moral" por Monfalvo y el "Evangelio y

el Sylabus" por Montúfar, que guardo con cariño.

¿Y que obra lee Ud. actualmente'? -"El Visitador" -- de José Milla. -:-Hermosa literatura!

,-·-Sí, sobre todo, sana. Pepe Milla :tiene intención picarezca¡ pero no ofende la moral.

--Justamente, así es. Aunque pertenece a la vieja escuela, sus obras despiertan interés. Es fecundo, esponiáneo y de sana erudición.

y creyendo terminada mi visita hice ademán de retirarme.

El General - An±es de retirarse quiero facilitar a U. para que la lea una obra nueVq, nuevecita, con el olor de las prensas. Una obra de José Brisso: "La Revolución Portuguesa" Yo soy liberal, no puedo dejar de sel"~

lo, y sigo con interés iodo movimiento de libertad.

Se dirigió a un anaquel y trajo la obra. An±es de entregármela se puso a hojearla y me mostró el retrato de Guerra Junqueiro, el "insigne poeta, alma de la revolución" - y del Doctor Teófilo Braga, Prezidente de la República, nacido el año de 1843. Braga. el sabio Braga. que de cajis– fa, llegó a Doctor y después a la primera lnagistratura de su país, autor afortunado de "Tempestades Sonoras" y "Visión de otros tiempos".

Viendo ambos a este ú1±imo, le dije:

-Debe ser un hombre de talento, a juzgar por el desarrollo del cerebro y tiene rasgos de la raza mongólica, fígese Ud. en el bigofe ralo y caído, ojos oblícuos.

Ciertamente, fiene esos rasgos. Ojalá pueda afianzar la República sobre bases fuertes. Es tan difícil el gobierno de los pueblos, dijo el Gene– ral, como hablando consigo mismo, tan difícil. La principal dificultad con– siste en no poder satisfacer, como. se quisiera, a iodos los amigos de una situación o de un movimienio político.

-y a propósito de la frase, le gusia a U. la política'?

-A mí, dijo con viveza, a mí, jamás me ha gustado. Digo, la po-lítica de engaños que hacemos aquí. Yo soy hombre recto y claro y no sirvo para el caso.

y quedóse viendo con distracción el libro de literatura que tenía so– bre la mesa de la carpeta roja.

A RAIZ DE LOS SUCESOS

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El articulo a que alude mi interview con el general Aurelio Estrada fué publicado en el número 4319 de "El Comercio". Dice:

Como se ha interpretado de manera torcida la concurrencia de los liberales de Managua al Campo de Marte la noche de los últimos sucesos que iodo el país conoce, creo de mi deber explicar lo ocurrido, en la con– fianza de que mis palabras merecerán crédito, sabiendo, como se sabe, que yo acostumbro decir siempre la verdad.

El lunes en la rnañana recibí invitación de mi hermano El Presiden– te de la República para concurr"ir a una cita que se verificaría a las 12 m. Yo llegué punlualmenie El la hora. indicada, y al juntarnos tuve con ~l la siguiente conversación que trascribo en forma de diálogo para mejor infe– ligE'mcia del ledor.

-Presidente - Ha llegado para n-tí el momento crífico. Tengo en mis Inanos los hilos de una conspiración del General Mena contra el Go– bilhno, y antes de que él me marre, prefiero deponerlo del Ministerio. Quie– ro que tú me ayudes.

-Esirada - Bueno, soy ±u hermano, ~qué quieres de mí'?

-Presidente - Pues necesito algunos de tus buenos muchachos para oponerlos en caso de resistencia.

-Estrada - ~Y este paso trascendental que vas a dar lo has con– suliado con el Ministro americano?

-Presidente - Si, Y lo aprueba.

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