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Gral. Don FERNAND,O, GUZMAN;

MARZO

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municipal, desde el primero hasta el último de sus agentes¡ al poder de todos los encargados'de velar por la seguridad, el honor, la vida y la pro– piedad de los Nicaragüenses: ilustración y honradeZ; en el manejo de nues–

tro corio tesoro, supresión de los empleos que juzgue innecesarios; orden y excesiva severidad, siquiera con la menor sonilira de impureza en el manejo de las renias¡ iales son mis opiniones en estos dos punías.

Conozco muy bien, que en el lugar en que estoy colocado, voy a ser por cuairo años el blanco de críticas acerbas, pero antes que tenerlas, de– seo por el contrario oír perpétuamente la voz autorizada y franca del su– premo juez de la época, del tribunal soberano de la civilización, de la opi– nión pública: la opinión tiene su voz y esa voz es la prensa: por ella iengo amor y veneración¡ yo la llamo en mi auxilio, deseo sus consejos, sus seve– ras indicacionesl y al invocarla para que me guie en fan escabrosa sen– da, no llamo a la prensa servil y aduladora, vendida siempre al poder y que coloca delanfe de los ojos del Mandatario una densa nube de incienso que no le deja ver los sufrimienios, las nec;:esidades y las verdaderas aspi– raciones del país:-republicano por convicción y por carácier, quiero oír los i::oJ;1sejos. de la prensa que crUica con mod~ración e independencia, quie-~

ro escuchar su~ juicios por severos que sean; y no temais nunca que un ag,en,ie del Gol.:>ierno vaya armado de inícuas leyes de circunstancias a po– nero.su ;mano s¡obre el que iuvo energía y patriotismo bastante para censu~

ra1" lqs t;l.bllso¡:l q las equivocaciones del poder.-La calumnia misma me en· pOJ:i1rará ~mPl:i'sible; la despreciaré, pero no la,. perseguiré jamás.

, Hago finalmente un llamamiento a todos los hombres que por su

i~ustraci6n Y' por sjJ.s hices puedan ayudarme en mi tarea; a ±odc;>s los hom– bres honrados sin diferencia de opiniones políticas, que lleven en su al. ma verdaderos sentimientos de progreso y amor pafriol al pueblo pacífico

y laborioso que quiere libe:dad y orden, que ama el trabajo y en quien veré siempre el mejor apoyo de rt:I.i Gobierno.-Deseo también que el ex·

tr~nj.xo activo,y emprendedor ql{e quiera hacer de la nuestraosu segunda

pB:4"i~/~venga.y coopere con noso;l:ros en la obra común: que siempre me

,e.:g.gQ~traI'~ el prime~ cuando se' trate de iraer a Nicaragua la ilustración; la p(}1:;>~;ación y él esp~ritu de empI:6Sa que nos falta.-Con este infento Se

dep~ procurar con empeño _el, ci,úl±ivo de nuestras relaciones exteriores, prin<#pal:rnente con la gran Rep-(fblica de los Estados Unidos, con quien por desgracia hasta ahora na tellemos ningún tratado; y ni por un mo–

~ento debemos olvidarnos de cuán necesario es al porvenir de Iluesira pa– tria, . ir poco a poco allegando nuestros intereses a los de las ofras Repú– blicas Hispanoamericanas; y con especialidad a nuestras hermanas del Centro, hoy mas que nunca ligadas por un común desHno.

Conciudadanos!-Simp1e delegado del pueblo; encargado de intere– ses agenqs que me son tan caros, espero devolver el poder que me con– fiasteis co11. le. conciencia tranquila: del hombre honrado que ha querido cutnpl,ir oon su del:>er.-o-Es mi programa la forma del juramento que acabo de prestar; mi mas ardiente deseo procurar la felicidad de los muchos, aun

él despecho de la oposición de los pocos, y la mas grande de mis aspira– ciones concurrir como el último, pero como el mas decidido en la sania empresa de hacer de Nicaragua una verdadera.República, donde reine en toda su pureza el sistema consti±ucionB1, donde la liberiad, la seguridad y el orden no sean una quimera; y donde en fin, quien quiera que sea, pue– da encontrar entre nosotros un asilo franquilo y hospitalario.

Masaya, marzo 1 9 cie 1867.

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