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EL DR. BONILLA CUENTA SU AVENTURA

LAS aprcciacion~s

hechas por "El Diorito", respecto de 105 asuntos entre Honduras ¡y Nicaragua, V lo que he referido acerca de la doblez con que se procedió desde el principio para adormercer á Vázquez mientras

se afilaba el puñal para descargarle certero golpe, Son verdades que muchos conocen y que no se atreven á

negar ya los mismos que consumaron los hechos, des..

pués que el Dr. Bonilla confes6 todo minuciosamente y

con ia franquezQ propia en m~morias de ultratumba,

en un documento solemne, anal Mensaje dirigido al primer Congreso hOl1dureño instalado á raíz del' triunfo

de la revolución. Refiere allí todas sus correrías en las diversas tentativas que hizo por escalar el poder, con.. signado hasta las menores circunstancias de todas sus evoluciones. Cuenta, por supuesto; que encontró apoyo en Nicaragua, qua organizó allí una expedición y se re– fugió también después del fracaso, cuando las fuerzas hondureñas le persiguieron, se internaron en el territo.. rio de Nicaragua y tuvieron lugar las quejas y reclama– ciones que ferminaron con un arreglo diplomático de pura farsa. Refiere la aventura en que todos los suyos

se metieron con los revolucionarios de Julio por la pro– mesa de que les ayudarían enseguida para hacer nueva tentativa en Honduras. Revela que se creyó conve.nien.. te aplazar las operaciones y provocq:f á V6zquez 'de un modo indirecto, a fin de que, con algún acto impruden–

te, diere visos de justicia á las hostilidades de Nicara–

gua. Confiesa que eso no tardó en suceder, que' Váz..

quez cayó en los . lazos que le tendieron, que los /acon–

tecimientos se desarrollaron con f(tlicidad y rapidez y que nunca fué una promesa tan "fielmente cumplida"

tomo la que á él le hicierol1 los revoluciol1arios de Ni–

caragua.

FALACIA DE BONILLA COtll VAZQUEZ

Todo eso está referido con 1Q.1 sencillez y naturali–

cloe{, como si se contara lo más ¡"ocente del mundo, lo más grandioso que debiera lIevar~~ á cabo sin escrúpu–

lo en los medios,. sin importar un l'ledo la sangre derra– mada y los tesoros derrochados, .!í'! tolnar en considera– ción las desgracias de tantos PUe!>los, los ayes de tan.

tas víctimas, el cúmulo de miseriq~ que deia en pos de

si el paso de los ejércitos empeñqcjos en luchas terribles

y sangrientas. Todo eso no valí~ nada; 'lo que impar.. taba era adormecer á Vázquez para asestarle p.uñalada de pícaro; paliar el crimen con aparente provocación, lavarsa las manos, y; como qui~Í1 no ha hecho nada,

sentarse muy fresco el palió presidencial á descánsar de

las fatigas; á gozar de sus victori,as y á referir sus ha– zañas para honra propia, consuelo de las víctimas yen.. señanza de las futuras generaciones. Si, no hay duda, esas enseñanzas son muy fecundqs; allí está condensa.. da la historia de la intervención de Nicaragua; allí está la justificación más elocuente de Vásquez; allí está la acusación más terrible contra Zelaya y sus compañeros que llevaron 6 los nicaragüenses 6. morir en Honduras

por cumplir fa promesa que dieron á los que les ayu–

daron á escalar el poder para coronar sus aspiraciones. Sí, lo que el señor Bonilla dice en su Mensaje, es la acu.. saci6n más' autorizada, más fulminante, má$ abruma– dora (ontra los que encarcelaron á los nicaragüenses y les arrancaron

$U dinero, para hacer una guerra por

ellos provocada con premeditación y ardides; contra los

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que asolaron á Nicaragua lIe"a.ndo á sus pacíficos mo.. radares á verter la sangre de sus hermanos y vecinos por colocar en el poder á quien deberla servir de apoyo al tirano ele su patria para ahogar las manifestaciones de la opinión pública; contra los que, sin pensar en las funestas consecuencias de un ,precedente inmoral, sacri.. ficaron 6 dos pueblos y violaron las leyes internaciona.. les, por tener la satisfacción de un motnento~ Sí, el

Mensaje del Sr. Bo¡nilla es la mejor enseñanza, eS un fa– ro luminoso que d·is!pa toda~ las sombras de la historia

que narro, que e)C;plJca los ~!~.terios de qué se rodearon

los regeneradores de Nicaragu¡' y libertadores de Hondu– ras y deja ver en toda sU deformidad á los farsantes,

6 los logreros, 6 ~os héroes ·por fuerza, á los patriotas de nuevo cuño, á los fustigadores, saqiJeador~s y asesi..

nos de los pueblos.

REGRESA E~ DR. BONILLA DE GUATEMALA

SI~ ENCONTRAR APOYO

Cuando el Dr. Bonilla regresó de su excursión po– lítica á Guatemala, todo estaba ya listo para efecfuar la invasión por Choluteca y Yuscarán Ó la vez y sólo es– petaban su presencia am y conocer el resultado de sus

ge~.tiones, porquEl si el Gobierno guatemalteco ~e opo– nlq á la zanganada de Hoii!;luras, no podria verificarse la fi~sta por más ganas que 'tuvieran. El Dr. vol~ió bas– tante bien despachado, no consiguió todo 1<> que' desea– bal pero con fo que obtuvo. podia contentarse. EH que– ria qu~ Guatemala interviniera también en su favór pa–

ra C;lsegurar el éxito de su empresa "libertCldora'-; pero el Gobierno de allí no tenía interés en el cambio, carecía

de objeto para él entrometerse en ItI cuestión y se excusó

manifestando al pretendiente, que, supuesto contaba ya

con el apoyo de Nicaragua, tenia bastante para salir airoso en su empresa. Y realmente era bastanté si él contaba, como debía suponerse, con recursos y qlgunas

simpatias en su pais. Guatemala no le ayudaba, pero

le dejaba hacer; lo que, era mucho, si se atiende tí que

ha sido constante empeño suyo el que los gobiernos hon–

dureños se pongan y se, quiten á su capricho, lo mismo

que ha pretendido El Salvador, porque ambos, Eln su eterna lucha, quiElren siempre· tener de su párte á Hon·

duras, el uno para resistir y el otro para dominar más fácilmente y asegurarse la hegemonía en la América

Central. Honduras ha sido siempre el campo de bata· Ila de salvadoreñós y guatemaltecos y de ahi el que nunca se haya vistó libre de la Influencia de unos ú otros. Sus gobiernós han sido impuestos, han sidó el

resultado de la intervenci6n, más ó menos descarada, más ó menos desastrosa, pero de todos modos interven..

ción al fin. El único que se habia consfifuido por si,

el primer gobierno nacional que tenía ese país era el de Vázquez y querían botarlo para sustituirlo con otro impuesto, aunque fuera por Nicaragua, ya que Guate..

mala y El Salvador no se metian. Estaba, pues, libre el campo y era oportuno operar. La Legación de Costa Ri–

ca no había regresado; p~rmanecía en Tegucigalpa ne.. gociando la paz; no se esperaba allí la guerra, estaban adormecidos, el golpe $e;í~ certero como quería ~onilla;

Id puñafada de picara, ,como fe gusta Ó Gámez, le ~".

rlC/ con éxito. No habla que perder tiempo y ava"f9r ron si'" obstáculos Insuperables.