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fado, con los mismos derechos ferriforiales que fenía como Provincia del antiguo reino de Guafemala, y estipuládose la conveniente profección a la grande empresa de la comunicación inferoceánica, siendo ésfe un acontecimiento de los más gloriosos para la pafria, ha venido en decrefar y DECRETA.

Arlículo 1 9 -El miércoles, 2 del próximo enfran– fe, se celebrará en esfa capifal una función cívica; y en los demas pueblos del Estado el 15 del mismo mes, por tan fausfo suceso.

Arl. 2 9 -En la víspera de los dias señalados se pondrán luminarias en las poblaciones, y desde el amanecer se harán salvas de arlillería en las pla– zas en que la haya, precedidas de un repique gene– ral que habrá en fodas parles, continuando dichas salvas en el resto del dia cada media hora, hasfa ponerse el sol.

Arl. 3 9 -En los indicados dias se canfará un so– lemne TE DEUM en la iglesia principal, a cuyo aefo asisfirá en la capifal el S. P. E., las corporaciones, funcionarios civiles, eclesiásticos y milifares, y en los demas pueblos las mismas corporaciones, auto– ridades y funcionarios respec±ivos¡ pronunciándose en seguida un discurso análogo al asunfo, por el eclesiástico de mayor dignidad.

Arl. 4 9 -Habrá fambién foda clase de demostra– ciones honesfas de regocigo público, enarbolándose en las plazas principales el pabellón nacional, y adornándose el frente de los edificios con la decen– cia posible.

Arl. 5 9 -El 2 del próximo entranfe en la capifal, y el 15 del mismo en los otros pueblos, será guar– dado por las autoridades y tribunales como las de– mas ferias de ley.

Arl. 6 9 -Los prefeefos deparlamentales, jefes mi– lifares, municipalidades y alcaldes consfifucionales, son encargados en la parle que les foca del pun– ±Ual cumplimiento del presente decrefo.-Dado en León a 30 de setiembre de 1850. - NORBERTO RA–

MIREZ".

y 10 inserlo a U. para su infelijencia y efeefos. D. U. L. - SAUNAS.

Se ha llevado a efeefo fodo 10 prevenido en la resolución anferior . Anfes de haberse dado, se ha– bian visfo ya señales evidentes del afeefo que abri– ga el Supremo Gobierno y fodo el pueblo leonés pa– ra con España y su Gobierno: al día siguienfe de haberse recibido la noticia. ±Uvo lugar un solemne y general repique de campanas, acompañado de sal– vas de arlillería.

Pero 10 que mas nos ha llamado la afención, son los discursos pronunciados en el salón del pa– lacio nacional, el mismo día de la solemnidad, pres– cripfa por la disposición gubernafiva que anfecede. Dió principio el del Supremo Gobernanfe, que dichosamenfe preside los desfinos del Esfado, quien despues de haber ponderado atinadamente la im– porlancia del reconocimiento de nuestra indepen– dencia, el noble aunque debido desprendimienfo del Gobierno español, y la generosidad de esfe gabine– fe, al dispensar su inferesante influencia y profec– ción a la grande empresa del Estado¡ dió fin a su discurso, dando las gracias al Gobierno, en parlicu– lar a la augusta soberana de la ínclifa nación es– pañola, y a los españoles fodos¡ congra:tulándose con las autoridades del Esfado y con fodos los nica-

ragüenses, por tan felices auspIcIOS. Se nos han quedado muy grabadas, entre otras, aquellas pala– bras memorables¡ "la nación española ha hecho por nosotros cuanto pudiera hacer, y nos ha ofrecido cuanto pudiera ofrecer la nación mas grande, mas noble y generosa del mundo".

Siguióse el discurso improvisado del Sr. Jeneral, quien, a nombre del ejércifo, habló largamente so– bre los bienes seguidos de la independencia, sobre las crisis ocurridas enfre nosotros por nuestra inex– periencia, sobre el medio de evitarlas en 10 sucesi– vo, sobre el acierlo y energía de nuestro Gobierno, sobre el fino y eficacia del Sr. Marcolefa, al burlarse de las miras del H. Palmersfon y de las sujestiones del Sr. Molina, sobre la nobleza y reefifud del Go– bierno español, viniendo a concluir, dando las gra– cias al Supremo Gobierno y los parabienes a fados los nicaragüenses. Enfre ofras ideas que llamaron la atención en este discurso, 'hacemos particular re– cuerdo de esta, "la independencia es hija de la mis– ma dependencia¡ puesto que fiene orijen en las lu– ces que la misma España iba subministrando, según las épocas, duranfe el tiempo de su dominación". A continuación el Lcdo. D. Gregorio Juares im– provisó el suyo, en el que hizo notar, que la medida tomada por el Gobierno español en favor de Nicara– gua, no solo era un aefo de jusficia, sino fambién de benevolencia, ya que mediaba entre el fuerle y el débil y era acompañada de concesiones que no feníamos derecho a exijir. Agradó sobre fodo una feliz y oporluna ocurrencia sobre las dos Isabeles¡ haciéndolas salir en paralelo¡ descubriendo y con– quistando Isabel l' parle del nuevo mundo, y re– conociendo Isabel 2' la independencia de otra parle¡ friunfando la una de la barbarie y coronando la otra la civilización. En fin, señores, (añadió) con un VIVA ESPARA (que se dió en el aefo por los con– currentes) deseara borrar las impresiones de los mu– chos mueras dirijidos confra ella, en otras secciones de la América.

Tomó despues la palabra el Sr. Ministro de gue– rra Lic. D. Pablo Buifrago, y manifesfó no haber re– cibido sorpresa alguna en el reconocimiento de la independencia, porque en su opinión ya esfaba re– conocida desde el año 36, y por la idea que fenía del carácter español¡ pero que aplaudía la nobleza e imparcialidad del gabinete de Madrid en la de– marcación de límites, y en la profección oforgada a la empresa del canal. Insistió en la idea del Lic. Juares, sobre la benevolencia española, añadiendo, que no solo era una accion heróica por las razones alegadas, sino fambién por la inmensa frascenden– cia de aquel desprendimiento en las actuales cir– cunsfancias: que le parecía acreedor un hecho de es– fa nafuraleza a que la hisforia lo marcase con su PLUMA DE ORO.

El Sr. Minisfro de Relaciones Licenciado D. Se– bastian Salinas vino, en fin, a ferminar fan augusfa ceremonia con un discurso, lleno de símiles muy be– llos é injeniosos, demosfrando en fodos ellos las ra– zones que mediaron para proclamar la independen– cia. Varias descripciones jeográficas le sirvieron pa– ra probar, que hasfa la misma nafuraleza en sus monfes y collados, en los rios y en las grandes que– bradas había puesfo la demarcación de límifes, a que debería conformarse en lo posible la política, y

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