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ga constar debida y ·legalmente en ese Consulado General, como debió verificarlo para ser inscrito en la mafrícula, que su padre no perdió la nacioné!.li~

dad española y que él siguió, por consiguiente, la misma no dando después lugar con sus actos a ser considerado como ciudadano nicaragüense, insista V. S. en la reclamación entablada, haciendo uso de las noticias y documemos que le facilite el interesado, pues esta solo puede ventilarse en es:l:e país que es donde deben obrar los datos necesarios para resol~

verla con arreglo a justicia.

De Real orden, comunicada por el Sr. Presiden~

te del Consejo de Ministros encargado del Despacho de Estado lo digo a V. S. para su conocimiento y efectos que se expresan.

Dios etc....

Dice una nota al reverso, R. orden fecha 7 agosto j 60

al Cónsul G1. en Centro América.

COMUNICACIONES

Vice-Consulado de España en Nicaragua.

Chinandega, mayo 4 de 1887.

Señor:

Tengo el honor de comunicar á V. E. que, ha– biendo tomado últimamente parlicipio en los asun– tos públicos del país, el súbdito español Lic. don Fe– derico Navarro, á pesar de recomendaciones dirigi– das por este Vice-Consulado, ha tenido á bien reti-

rarle su correspondiente carla de nacionalidad, si~

guiendo instrucciones del Excmo. Señor Ministro Re– sidente y Cónsul General de España en Centro Amé– rica.

Sírvase V. E. aceptar los sentimientos de alfo aprecio y distinguida consideración con que tengo el honor de firmarme de V.E. atento s. s.

Angel Naval'l'o

Honorable Señor Ministro de Relaciones Ex:l:eriores del Supremo Gobierno de Nicaragua-Managua.

Managua, mayo 10 de 1887.

Oporlunamente he recibido el atemo oficio de

U., fecha 6 de este mes, en el que se sirve parlici– parme que, siguiendo instrucciones del Excelentísi– mo señor Ministro Residente y Cónsul General de España en las Repúblicas de Centro América, ha re– tirado U. al súbdito español don Federico Navarro, la carla de nacionalidad que como tal lo acreditaba, después de haberle dirigido reconvenciones, sin re– sulfado, por su ingerencia en los asuntos políticos del país.

Mi gobierno estima debidamente la conducta observada en ese caso por la Legación española, y espero que U. se sirva llevarlo a su conocimiento. Soy de U. atento servidor.

El Ministro encargado de laCarlera de RR. EE.,

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FIN