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« Previous Page Table of Contents Next Page »caragua son dos: el añil bastardo (indigófe– ra añil), conocido en el país con el nombre de "jiquelite", y el añil franco (indigófera tinetoria), conocido con el nombre de "mos– tacilla". La principal diferencia está en la
!rula, que, en eJ prilnero, es una vaini±a rec– ia, y en. el seQundo es ~~rva. rAJ:!lbas dan
una buena cahdad de a!lil¡ la ulhma es la
menos rica en m.a±eria coloran1e, pero la ca– lidad es superior.
El aiiil de Nicaragua es conocido en el
comercio, OTa por su propio no:rnbre, ora con el de añil de Gua±eluala; las calidades se 1n– dican por nún1.eros, de O á 9. El número 9
(flor sobre ,bueno) es el r;>as ~s±imado: <;1 co–
lor es azul Intenso, la paSJ.a bIen hornogenea,
blanda, mas ligera que el agua; y aplicán– dola sobre la lengua absorbe prontamente la
humedad; la rolura debe preseniar un aspec–
to concoidal, y, puliéndola con la uña, debe
presentar un reflejo color lTI?rado broncea–
do' al quenmrlo debe produClr vapores pur– pu; lnos y rutilan±es.
8 (sobresaliente) y 7 (code J son de bue– na calidad ordinaria; 6, 5 Y 4 son ordina–
rios; 3, 2 Y 1 son inferiores. El comercio re–
procha al añil de Nicara~ua su emp'aque en zurrones, que lo expone a llegar caSl en pol– vo. se queja iambien de que presenta en un
mi~mo zurran números lnuy diferenles. En
airas tiempos se falsificaba el añil mezclán–
dole arcilla y aun alrnidon; pero estos frau– des han desaparecido compleiamente de la
fabricacion nicaragüense.
Los terrenos propios para el cuHivo dol añil son las llanuras, con tiorras ligeras y per–
meables, y con una capa profunda de "hu_
mus"; esto cuHivo agola In.uy pronto, no la fedilidad propiamente dicha del suelo, pero su aptitud para desarrollar el principio colo– rante.
Despues de la quema del desmonte so
siembra casi corno el rnaiz; la germinacion se nota inmedia±Brnen±e; se desyerba con mu–
cho cuidado, y, al cabo de tres meses, el ji– quelite está á punto de cortarlo, lo quo se reconoce á la primera aparicion de las floros. La cosecha se hace con el machete; se cortan los tallos enteros y se atan por manojos; tan pronto corno se puede, se llevan al estableci– miento de extraccion (obrage). Despues de esta prÍlTIera cosecha puede haber oira llama– da de "banderilla"; hay campos que han da–
do hasta ires caries, pero los últimos son muy
lejos de producir el resultado del primero. El
año siguiente se caria el retoño, que á veces
es mas ventajoso que la tinta nueva, sobre todo en cuanto á la calidad; se corta tambien el "tras "retoño", y despues 01 campo debe
quemarse y sembrarse de nuevo, ó abando–
narse en restrojo para que descanse.
Un obrage se compone esencialmenie de dos pilas, la una mas elevada que la otra. ?n la primera (pila de maceracion Ó remo– l?-dor). se colocan por capas los manojos de llqueI1te, mantenidos por vigas, cargadas de
un peso cualquiera, ó mantenidas en sus ex– trerüdades por medio de disposiciones va– riables que tienen por objeto impedir que se levanten, cuando las plantas se hinchan por la fermen±acion.
. El agua se recoge por medio de una pre–
sa, y casi siempre se reune primero en un
tanque en que doposita las impurezas que tieno en suspension. Una vez llenado el re–
mojador, la fermentacion comienza casi ins–
tantáneamente. En primer lugar es muy dé– bil durante 6 á 9 horas, segun la tempera– tura, el viento, la calidad del agua, la ma– durez mas Ó mellOS perfecia de las plantas. Puede decirso que no hay un producto tan delicado corno el añil, y tan expuesto á la
aecien de las influencias exteriores; una pre– caucion olvidada, un accidente insignifican–
le, puoden hacer bajar la calidad de 20%, y
aun disITlinuir la cantidad.
Despues de diez horas de fermentacion
es necesario seguir la operacion con mucho
cuidado de minuto en minuto; el agua pare–
ce enlances el1 ebullicion, y su temperatura es elevada; los glóbulos, blancos al princi–
pio, pasan pronto al rojo purpurino y forman
una espuma cobriza; luego la ferrneniacion comienza á menguar. En±ances se descania
en la pila inferior (batidor); esta operacion se llama "botar". [;1 licor es de un amarillo
brillante; se bale, ora con una especie de re– rnos, ora con aparatos hidráulicos. Es±a ope– racian fiene por objeto oxidar el añil, que,
hasta ahora, se había sim.plemen±e disuel±o
en el agua al estado incoloro. Oxidándose,
se vuelve azul y se ag10rnera en pequeñas
!TIasas microscópicas, en suspension en el lí–
quido. La precipitacion de esios glóbulos so obtiene por 1l1.edio del zumo de una planta de la familia de las malváceas, muy comun en los campos, y llamada "escoba negra".
La pasta ó lodo azul así obtenida se se–
ca al sol y despues se empaca en zurrones, es
decir, en un saco de tela que se cubro con un cuero crudo, cosido de un modo particular (arpillage) .
Desde algun tiempo se trasporta el líqui– do espeso obienido por la precipitacion, en. caldoras donde se cuece y se espuma, para purgarlo de las impurezas que contiene; lue– go se evapora hasta que tenga mayor consis–
tencia, se prensa y se pone á secar. Ese es
un paso hacia las reformas todavía muy nu–
!TIerosas que necesita la industria del añil, no
solamente en el cultivo de la planta, sino iambien en las operaciones múltiples y deli–
cadas de la extraccion; las indicaremos en el
capílulo siguiente.
Hé aquí los daros prácticos de las ante– riores manipulaciones: en el lTIOmento del corie, cada pila necesita: 4 cortadores, 2
arrieros ó carreteros, 4 lTIulas ó una carreta
con sus bueyes, 4 pileros y 1 quemador do yerba. En cada pila se hace una pilada to– dos los días. Una manzana produce 2 pila– das de yerba, y cada pilada rinde 20 libras,
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