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y de otros dos que dejó la provincia de Gua– temala por la mesma razon, hizo el padre Comisario general poco despues una custo– dia, corno adelante se dirá. Pidieron asi mesmo los frailes de Nicaragua que se acor– tase el Hempo del capítulo provincial para que Se pudiese visitar toda la provincia en Hempo seco, y volverse los guardianes á sus

casas antes de entrar las aguas, concedió–

selo el padre Comisario y señalóles el dia del capitulo para la Dominica más cercana de la fiesta de la Purificacion del año de ochenta y ocho, estando primero echado y señalado para los catorce de Julio del mesmo año.

Sábado calorce de Junio se tuvo la con– gregacion, porque la que el provincial habia tenido con sus difinidores en Costa Rica no habia sido válida. Hízose eleccion nueva de guardianes, y determináronse algunas cosas para el buen régimen y gobierno de aquella

provincia, en la cual, cOznD dicho es, habia

veinticinco religiosos y quedaron doce casas,

porque aunque se dejaron las dos sobredi_ chas, tornaron otras dos que estaban en la comarca y las podia visitar el provincial. La lengua que hay en estos conventos y sus vi– sitas es la mangue en la mayor parie de Ni– caragua, aunque tambien hay indios naua_ les, y en la isla de la Laguna se habla otra lengua pariicular, en Costa Rica otra y olras pero por toda esta Herra corre la mexicana' corno queda dicho. Domingo quince de Ju: nio Se leyó á comer la tabla de aquella con_ gregacion y quedaron todos los frailes con– solados, contentos y conformes, y luego Se

~omenzaron á apreslar para irse á sus con–

ventos y casas. Lo mesmo hizo el padre Co– misario para dar la vuelta á Guatemala, y es– tando ya de camino para partirse aquella tarde, por no perder tiempo, entendiendo po– der pasar las ciénagas de 20moto y Condega antes que del todo entrasen las aguas, sobre– vino un aguacero tan recio que no le dejó sa– lir de casa, y así se quedó aquella noche allí.

De como el padre Comisario general dió la vuelta para Guatemala, y de como llegó al convento del Viejo.

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Lunes diez y seis de Junio, concluida ya la congregacion sobredicha en Granada, sa– lió el padre Comisario general de aquella cibdad tan de madrugada, que aunque an– duvo perdido un ratillo y estaba el camino de las lomas tan llovido y tan malo de pasar, que tuvo necesidad de apearse algunas ve– ces de la bestia en que iba, porque con el agua se habian hecho grandes hoyos y bar– ranquillas en el mismo camino, con todo es– to, ancladas aquellas cuatro leguas' peque– ñas, llegó antes que amaneciese al pueblo de Masaya. Cayó en una de aquelltis bar– ranquillas fray Pedro de Sandoval, y cayó el mulato del síndico de San Salvador, que por mandado de su amo iba con el padre Comi– sario, corno atrás queda dicho, pero fué Dios servido que no recibieron daño ninguno. Pa– só de largo por Masaya el padre Comisario, y lo mesmo hizo por Nindiri, y andadas aque– llas cinco leguas llegó muy cansado y fatiga– do al pueblo de Managua, donde se detuvo lodo aquel dia. llovió mucho aquella tarde y mucho más despues de media noche, y á aquella hora llegó un regalo y refresco que la encomendera de Masaya, española prin– cipal, le envió, el cual aquel dia y otros hizo mucho provecho, porque no llevaba ninguno el padre Comisario.

Maries diez y siete de Junio salió el pa– dre Comisario de madrugada de Managua,

y andada una gran legua por el atajo por donde habia ido á la ida, al subir de la cues– ta, junto á la fuente que va á dar á la lagu– na de Lean (corno atrás queda dicho), era

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tan grande la obscuridad, así por estar el cie– lo muy nublado corno por la alta y estrecha montaña que allí hay, y por la estrechura del camino, que aunque los que iban delante lle– vaban unos paños blancos en las espaldas que servian de farol á quien los de detrás si– guiesen, no bastaba esto para verlos y se– guirlos, estaba el cammo todo ahoyado y lle– no de bárranquillas, que con la demasiada agua que habia llovido y robado la Herra se habian hecho, y así. iban todos los frailes á grandísimo peligro y con recelo de caer y ha– cerse pedazos, porque á la banda del Sur ha– bia monte alto y ninguna anchura, ni aun lugar para apartarse nf salir del camino, y á la del Norie estaba pegada con el mesmo camino una profundidad temerosa, y cual– quiera que por allí cayera fuera imposible escapar, si no fuera por milagro. En este mal paso, y á esta sazon y coyuntura cayó fray Pedro de Sandobal con la bestia en que iba, y fué milagro quedar vivo, pero quiso Dios que cayese hácia la parie del Sur, y así no se hizo daño ninguno, que á caer á la otra par– te, sin duda qúe pusiera en trabajo á los de– más de llevarle á enterrar á Managua, don– de está enterrado don fray Antonio de Za– yas, fraile nuestro, Obispo que fué de aque– lla provincia y Obispado. Sucedió junta– mente con eslo que queriendo el mulato de San Salvador, que iba detrás de todos, pasar. adelante á ayudar al Sandoval, corno el ca– rnina era estrecho fué forzado á meterse con una yegua que llevaba entre los caballos, los cuales, aunque se alborotaron un poco, pres-