Page 31 - RC_1965_01_N52

This is a SEO version of RC_1965_01_N52. Click here to view full version

« Previous Page Table of Contents Next Page »

El gorgojo

Un insedo volador que alcanza a trans– portarse a grandes distancias y a reprodu–

cirse en una forma alarmante, (su ciclo de

vida es de alrededor de 30 a 40 días y en proporción de 10 insedos por :macho), en un periodo aproxi:mado de 2 años, se ha espar– cido sobre :más o :menos las tres cuarías par– ies de las áreas de pinos de Honduras, cons– tifuyendo la epide:mia de gorgojos tnás viru– lenta y extensa registrada hasla la fecha.

Los :mejores bosques vírgenes de los pi– nares de este pais están ubicados en las áreas afedadas. El rif:mo de árboles :muerías se ha esti:mado en unoS 160.000 diarios y la epi–

demia aún confinúa propagándose sin que

sea posible establecer con certeza cuándo ter– :minará el flagelo de este insedo volador lla– :mado "el Dendrocionus".

Demasiado poco, demasiado ¡'CU'da

En Honduras, conocida co:mo la tierra de los pinares por la gran abundancia de esros extensos y :majestuosos árboles, se ha hecho "de:masiado poco, de:masiado tarde" ante la epide:mia que no solo constifuye una calanl1– dad nacional, sino que, al extenderse a paí–

ses vecinos, confiere a la ~:mergen(iia un ca–

rácter regional que, a su vez, implica 1", ne– cesidad' de enfocar las posibles soluciones a largo plazo, dentro del marco de un progra–

lTIa centroamericano.

Proyedcínc!ose el Guatemala y Nicar(j~lua

T,os pri:meros focos de infestación fueron observados en el depar:l:amento de Olancho, cuyo avance y proporción alcanzados influ– yó para que apareciera en poco liempo en el Norie del país, y posteriormente hacia el

Occidente con proyecciones de encontrarse

en pocos meses en la frontera con Guatema– la, adeInás de que ya se ha presentado en las fronleras con Nicaragua.

No hay mal que por bien no venga

Las proporciones en que la epidemia se ha desarrollado y el rifmo de expansión que presenlan indican la urgencia no solamente de soluciones de eInergencia, sino de planes a largo plazo encaminados a luodificar las eslruC±uras del país en lo que respecia a la utilización de su riqueza natural. Sin em– bargo, la naturaleza dramática de la emer– gencia presente crea condiciones favorables

para el desarrollo de una nueva conciencia nacional en lo que refiere a la explotación de los bastos recursos natural es del país, tra– dicionahuente relacionados con proyecios re– legados a un lejano futuro. Pero, "no hay mal que por bien no venga" si, COInO se pien–

sa, ésta nueva conciencia fuese el punto de

padida para la eliminación radical de una íarga tradición que se ha reflejado negativa– Inen±e en la posibilidad de desarrollo de Honduras.

Organizaci6n forestal

Se estinm que cerca del 60% de las tie– rras en Honduras solo son ulilizables para cosecha foreslal. Los recursos madereros del

país cons±iluyen su más importante recurso

natural 'l ofrecen amplias oportunidades de expansión industrial, lanto para proyecios inmediatos como de largo alcance. Una or– ganización forestal es, por lo lanto, de lo más básico en Honduras, a fin de establecer la

coordinación necesaria de los diversos depar–

iamentos del gobierno, y proveer al país de las normas y procedimienios indispensables para la protección de los intereses públicos, creando al InisIno tiempo condiciones favo– rables para el desarrollo de la inversión pri– vada.

PI'Ogl'I:Ul1tl de rehndcld6n

Tal labor Se ha ido volviendo lnás difí– cil a medida que el perímetro del área infes– tada aumenta y la epideInia se extiende den– tro de las luás inaccesibles y donde existen

lTlayor número de aserraderos. Los estudios

del alcance e iniensidad de la epideInia rea– lizados a =ediados del año pasado indica– ban que un control direcio sobre la misma ya no era faciible, desde el punto de vista

econémico y práctico: la infesiación era de~

rnasiado extensa y Se movía con demasiada

rapidez. La Misión del Departamento Fores– tal de los Eslados Unidos recomendó por con–

siguiente un prograrna de retardación, den–

tro del cual algunas brigadas frabajarian en la vanguard~a de la epide=ia para talar y tratar quhnicamente los árboles infestados,

mientras oiras brigadas esiarían cooperando

con los propie:larios de asel'raderos en un f1"a–

ta=iento de control cOInbinado de la epide–

lnía y una ope't"ación de salvarnenlo de la

Inadela. El gobierno de Honduras jomó rá–

pida acción cuando los sucesos fueron cono–

cidos, pero la inexisienci.a de una organiza–

ción permanente capacitada, hizo imposible las Inedidas rápidas y eficienies que reque– ría la emergencia. Era necesario el pronto descubrimienlo de focos incipientes de infec-

-22-

Page 31 - RC_1965_01_N52

This is a SEO version of RC_1965_01_N52. Click here to view full version

« Previous Page Table of Contents Next Page »