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, mO de la República de Nicaragua" Walker, por

gobl

e rte l/ayudar ía y cooperaría con su persona y sus

sU pasos

I

varios, tales como hombres

J

en la causa de

reCur d I'b d" (*) Cuba Yen favor e su I erta

I I I

Mientras Goicuría y Walkel estaban negociando el futUIO de Cuba, Randolph, CI ittenden y el joven

~ar rison llegaban a Granada, junto con cien nuevos

~r ntarias Fue un momento feliz para Walker reci-

~a ua su viejo amigo en un ambiente de poder y fama

E" noche festejó a los tres visitantes de San Francisco

SQ un banquete al que asistió el Presidente Rivas y

~~~a el gabiente Al siguiente dio se reunió privada– mente con Randolph

Mas tarde, informando sobre la acción de Walkel I incautar la Compañia del Trónsito, muchos periódi– a s americanos dijeron que al aceptar la oferta de

~aanison, Walker mostró impulsi.vidad e, igno:a;,cia rayana en la idiotez .,Walker ml~mo no JustifiCO ,su acción Pero su, decislon estaba leJos de se; Impul~/va

o ignOl ante Varias semanas antes le llego la not ICla de Son Francisco que ciel to truco en la bolsa de cam– bios estaba en el tapete (*") No había nada en esto que [o tentara Na~ie podía leer ~os di?rios de New York como él lo habla hecho por anos, SI/1 estar cons–

cient~ del tlemendo poder de Vanderbilt Que él es–

taría precavido contra cualquier complomiso con

Garrison y Margan lo muestra el haber lecurrido estos a Randolph Walker apreciaba la ayuda de Garrison, pero ni la malentendí'a ni le atribuía valor excesivo Tarde o temprano tado serfa pagado por NicOlaqua por medio de [a reducción de la deuda de la Compañía Los pel iódicos de New York informando la cap– tura de Vandelbilt de la Accesoria del Trónsito llegaron a Granada antes del an iba de Randolph La cuestión pláctica que Walker tenía que considerar ela si sería mejor para él cooperOl con la cabeza legal de la compañía, Vanderbilt, o tomOl partido con los hom– bres a quien Vanderbilt había denotado Mientras

sólo esa cuestión estaba ftente a él¡ permaneció neu–

tral Queda la buena voluntad de la compañía cual– quiera que fuese la ídentidad de su cabeza Los peligros que corría al desafiar a Vanderbilt eran inequi– vacos Pero cuando Randolph lIe¡¡ó, la situación cam–

bió Esta era un hombre a quien él tenfa devoción sobre todos los hombres, el amiqo que mós de una vez había lIeqado a rescatarlo, que le había ayudado, que [e habío 'olvado

Un ,eolisto, un Nopoleón, no hubie,o dudado en sacrificOl lo omistod por lo ventajo política, le hubie,a

dado tiempo a! tiempo, hubielo pospuesto su d~cisión

ha'ta que Panelolph se cancara de esperar Pero no Walker El dicho de que "un omino en el poder es

Un amiqo perdido" no existía pora él Dada su acti–

tud ante la vida, no podía neqarle nada a Randoloh, punto é,te con el que Garrison contaba La motiva–

Ciót) de Walker en este oc;unto fue desel ita eniqmáti–

Comente po, él mismo "La amistad entre Randolph, -----

(') ("W o ScrOrmB, "WIIHam Wal\¡('l'lI DC!shms on Cubil", ('TI ].Iississippi •• VnP"" H;~t{)"irAJ RevJqw. 30)4, Vol r p 199)

( 1 (Wlllinm Walker, Ln GUerra. en Nicaragua. p 140)".

Crittenden y Walker ela de una naturaleza tal que no puede describi,se can palabras, pela la existencia de

tal sentimiento entre estos tt es es esencial pata uno

compl ensión de [a perfecta confianza que mm caron

sus actos en referencia al T ránsito ll

La piensa estaba sal prendida, por lo que pOlecía se, una ¿cción totalmente inesponsable, par pOlte de un hombre, que hasta entonces, habia llevado sus asuntos con conside/able habilidad Lo que no podía

saber elO que, razonando conforme las especiales ~l e–

misas de Walkel, su decisión fue perfectamente lógica Su vida nunca había sido guiada por los cánones del

éxito¡ sino por los cánones del honor personal! en los

que el reclamo de la amistad era primOl dial

Walker no desconocía las motivaciones económi–

cas de la política, Pero las 1 echazaba Fue esta apa– rente indiferencia a las realidades de la vida americana la que movió a Horace Greely a IICllnarle "el Don Quijote de Centro América" El Caballero de La Mancha no les pareció más desquiciado y absurdo a sus contem– poráneos que Walker a los ojos ele los grandes mag– nates de los años 1850 No fue solamente porque se atrevió a desafiar a Vanderbilt Estaba desafiando el empuje de una nueva era Estaba rompiendo lanzas con los fannidables molinos del podel del dinero Su propia descripción de la reunión privada can Randolph aunque abreviada, da indicaciones de las

fuerzas i~teriores que lo asediaban "Ranclolph infor–

mó a Walker que él y Crittenden habían cuidadosa– mente estudiado el cont,ata de la Compaííía Accesoria del Tránsito y ambos estaban claros y decidier?n en la opinión gue había sido tescindido Despues de ,[a debida reflexión, Walker estaba perfectamente satis– fecho que el arreglo con Garrison eta el medio, y por ese tiempo el único medio, para llevar a cabo la política vitol de la administración Rivas En verdad, ni el Presidente ni el gabinete sabían de [os mediOS por los que sus objetivos eran realizados, y ele hecho fue neces¡Jt io pOI a el éxito de las medidas que estas fueran conocidas por ion pocas personas como fuese posible Después que Randolph y Walkel estuvieron de acueldo

~n los términos del nuevo contrato de Tránsi1o, una cop pia le fue enviada a Garrison en San Francisco, siendo

McDanald el portador del mismo W R Garrison fue a Ne,w York con el pi apósito de informar a Charles Margan de los arreglas que se habion hecho" y se esta– ban par hacer, mientras Rondalph permoneclo en Gra– nada Nada se le dijo a Rivas del nuevo contrato de

Tlánsitol!

La falla de Walker en cumplir su responsabilidad con Rivas le inquietaba ~randemente Cuonda el Pre– sidente fue informado del asunto, exclamó indignado que Walker había consentido en "la venta del país" Esto Walker na lo negó POI el conhario, tristemente,

dijo

11

'La venta del país', usando la expresión de Ri~

vas, era una conclusión decidida de antemano el único medio de llevar al país una fuerza caoaz de pro– tegerla, no sólo de sus enemipos domésticos sino de sus enemigos extranjeros Quien desee dominar a

Nicaragua con seguridad debe tener cuidado que fa navegación esté controlada por aquellos que son sus más firmes y fieles amigos" Sin embargo, él no intentó explicar por qué habfa roto con Vanderbilt,

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