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de medirse y expresarse en cifras en esa realidad

Q ser

determinado por la investigación cientlfi.a.

Tan sólo así pueden tener la necesaria libertad para

actuar con habilidad y ~tierto. Si las fuerzas vivas de

una l1ación ¡pueden predominar de un momento a otro y

dar rumbos a su historia, y no permiten ni profesías ni

,ól,ulos, esos rumbos se hacen bajo el imperativo de la realidad ,ultural y so,ial presente.

No hay aqui ni cavilaciones de filósofo ni idealismo

dedamatorio ni simplezas de hombre de ciencia extravia–

do. Ni tampoco desconocimiento de lo que es esta

tierra tan querida.

Hay la evidencia que el mundo se ha transformado

en fos últimos 15 años a un paso acelerado como nunc.,:;r

¿;ntes. Que una nueva guerra mundial no es posible

-de serlo seria probablemente favorable a Améri,a La–

tina, cualquiera que fuese su resultado. Que inevitable–

mente, como consecuencia directa del resultado de la última guerra mundial, el socialismo tiene entre sus manos el futuro inmediato, , .. .,mo quiera que se le llame y como 'lujera que se le disfl ace, y que fal vez pueda originar

una nueva edad de oro en la historia de la humanidad si se

produce un i!cercamiento entre patronos y trabajadores.

Que más a menudo que entes la violencia, la brutalidad y

el crimen político recibirán su sanción ante los tribunales internacionales y ante la opinión internacional, si esa vía

de recurso es debidamente utilizada. Que para ser efer...

Uva una ¡propaganda debe ser fundada sobre conviccio..

nes, el número de personas capaces de juzgar de esas

convicciones habiendo aumentado considerablemente. Que p~ra ser efecHva toda actividad política debe estar

respaldada por una organización efic.;ente y por una ad~

ministración sin tad1D -y por lazos ~irmes con los partí..

dos que en otras naciones defienden las mismas ideas.

Que los excesos del individualismo desmedido y avasa– lIedor ha., pasado de moda y que lo está la humanidad del

que ,'epresenta al pueblo. Que está por terminar en la

historia de América asa época en que "gobernar es ha–

cer un negocio sucio" como alguien diio. Que la pobla..

ción de Nicaragua va aumentando ton una intensidad

creciente y que ese aumento es mayor entre los que na·

da tienen. Que el abismo de opulencia y de prosperidad

que separa las naciones industrializadas de las que no lo

Son va aumentando progresivamente a grandes pasos,

los países pobres quedando definitivamenle más pobre•.

Los que no me entienden y desconfían, me entende–

rían, mejor informados.

Conservadores de Nicaragua: nada augures tantas

kagedias para una nación como ser el ,ampo de balalla de ideologlas ajenas. Que estas páginas os lleven la

convicción que para mí no hay otra alternativa a una ae.–

ción políti,a moderna, hábil y opa,tuna que contribuir desde ahora al bien de nuestro puebla: Que esa acdón pollti,a debe ser sincera, honrada,< lim,pia y humana. Ha llegado el momento en que deberéis oplar par desapare.

cer en la insignificancia que el destino acuerda a los ilu–

$OS o bien lomar la inicJafiva de una actividad política

hábil pero sincera, decidida pero informada, firme pero

patifica en bien del pueblo de Nicaragua. Ha llegado el

momento de las concesiones, "no de los abancl:mos".

Esas concesiones deben hacerse por iniciativa propia, no ante las ventajas del adversario

Os digo esto sin desconocer los errores, las deficien– cias y los engaños del socialismo internacional, tales como el ahogo de la iniciativa privada, la nivelación por ah\sio, la treación del monstruoso Estado Socialista que todo lo tiene y no siempre administra ni invierte los bienes comu– nes (',.on acierto. Si me habéis entendido yo no defiendo aquí al socialismo

Os digo también sin desconocer lo que todos saben, que los más de los clamores populares en Nicaragua, sean o no ¡ustos, son el resultado de campañas de agitación sistemática y bien organizada. Os lo digo sin ignorar que sobretodo en política, las pasiones y no las ideas guían a

los hambres.

Gobernar supone el conocimiento de la realidad so–

cial de una nación. Toda ,política debe ser fundada sobre

la realidad nacional Lo decisivo para un país es el siste~

ma social de normas y de costumbres por el cual se rigen, en la práctir.a, las relaciones entre personas e institucio–

nes. Debe permitir la convivencia pacífica, ,el progreso,

el adelanto, el cambio inevitable que impone el progreso

económico e industrial Este último ocurre hoy día a un ritmo acelerado. Nefastos son en los cambios sociales.,

el deseo de emulación y rivalidad sor,;al, el aislamiento social, que nos hace solitarios en medio de la muchedum–

bre

Debéis pues aprender a llegar al corazón y a la meno te ansiosa y desesperada del pueblo. Sin refinamientos

inútiles y sin hinchazones declamatorias debéis aprender a comunicaros de manera efer.tiva y directa con las masas

La desinteresada investigación de problemas humanos y

sociales por hombres de ciencia aisladas y poca estimados

se proyecta hoy día con gigantescas proporc:iones en los

dilemas creados Ipor 105 movimientos de las masas.

Si tomáis esa iniciativa, de una manera desinteresada

y leal les quitaréis a vuestros adversarios su más poderosa

arma de propaganda entre las masas, generalmente apá–

ticas y polítkamente neutras. No creo que el comunismo

o el socialismo sean populares en América: son los erro–

res de sus adversarios los que les han dada triunfos espec– laculares y les darán nuevos triunfos. Me seria fá,i1 daros una "ltica bien argumentada y fundada sobre datos y

hechos de los errores cometidos en los últimos veinte y

cinco años por los regímenes democ.ráficos en política

internacional.

Conservadores de Nicaragua: nada augura tantas céis a tiempo, temed las consecuencias inevitables. Si no

las teméis preparaos a una lucha cada dia más denod.da por muchos prinr.ipios que en el mundo de hoy dia ame– nazan ser sumergidos ante el asalto de turbas hambrien–

tas y vengativas que vuestros enemigos saben utilizar con

el fin de epaderarse del poder y perpetuarse definitiva– mente en él. -21-

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