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"iiación ~l iábanquero, Sé aliató' éste en un le fin hasta la úliima gafa, no hacerlo así es momenfo y jajayándose los sanfiadores em~ ofender al dueño de la casa y jamás en la vi–

pret;di~ron la .partida fom~ndo la punfa la da a quien lo resienie de fal manera le vol– eX-sirVlenta qUlen los conduJo derech1±o a san- verá a brindar nada el jincho despreciado, la juaniar donde' Juan Rocha. experienoia demues:tra que por desabrido que El día de su santo los naiuchos echan la sea el brindis, el que convive con el indio se casa por la venfana según sean las comodi· lo debe de 'fragar para evitar dificulfades que dades de que gozan, y lo primero que hacen cualquier cirqunsJ:ancia. inesperada pudiere para que sobré todo en abundancia es d~s- acarrearle con el fiempo, pues el naiucho no tazar un cerdo cuya degolladura es la senal olyida nunc;a el hechó y cuando uno más ne– del comienzo de la chidhada, pues mienfr~s cesita de algo indispensable y ese algo se fie– uno le está eniedando a la víctima el puñal ne que conseguir en la vivienda del desairado la esposa del festejado o la querida en su de- indígena, es más fácil hacer que una mosca fedo se aproxima a los que rodean el sitio del nO sé sienie en un lugar en el cual ya se ha sacrificio condéscomunales guacales de si- posado una v~z qué el fueL'ano borre la ofen– lián los que J:;~par:te entre los circunstanies y sa ,hecha y verifique en seguida el servicio desde aquel lilómento es reparlir y repartir que Se le pide. .

silianci hasta que está fatalmente descuartiza- . . La costumbre de obsequiar al visitanfe do el chancho y el frifo principia a andar de fiane una bifurcación curiosa que vale la pe– mano en maria como una boca deliciosa para na de señalarse y es la siguiente: siempre los que se atipujan de guarapo, en seguida que llegan dos o más personaS de visifa de sus cargan 'la tripa en serio, as decir se desayu- misma ra~a o de la igual condición social de nan con vastas comaleras y frifangaen abun- ellos, ea decir trabajadores, allnque sean la– dancia, se van luego a la quebrada o río más di.nos, al que juzgan mas auiorizado le pasan cercano a bañarse, se aquietan mendoseando primero que a los oirCD un guacal bien gran– la bebiaia para 'no rodar desde un principio de lleno de pozal o de la bebida que les van

y a las cinco' de la farde suel:tan por fin la a :brindar, el escogido ioma el ariefacio e in– rienda del retraímiento la que no vuelven a continenti principié!- a beber y cuando ha ira– recoger sino hasta que ruedan. por fierra, y g~do algo se lo pasa a otro de sus compañe– cuando :tE11 hora llega los patios de las vivien- ros y éste a oiro h~s.ta que el recipiente de das dan la impresión de ser la derriba de un jícaro que siempre es admhable por su lim– desmonte sobre la cual pasó el fuego hace pieza hace un recorrido generaL de bocas1 fal unos quince días dejando solamente la pala- medida sirve para dar lugar a preparar

él. las

zóh trenzada y las cenizas barridas por la fu- mujeres la cantidad de guacales llenofl de lí–

ria de los alieios. quido que requiere el número de los visitan-Cuando los juanchadores llegaron el gua- tes y cuandq los que llegan son solo dos, en– rapo ya estaba dando punio en la cabe7:a de tOncés, en un !lolo guacal padrote o manta los desiazadores y así es que sin tus "ni mus guacal les reparten, bien sabido los obsequia– al ver llegar la comiliva de la suegra del fes- dos, por supuesio, de que tienen que darle fin tejado abandonaron el quehacer para ir a re- al contenido.

cibir a los visi:tantes a quienes despu,és de col- Pe esta bifurcación 4lé de la que se valió marIas de aiencioi1.eS, la indilgaron direcia- la l,uz' para salvar a Guzmán, ella compren– rt'\Emte contra el lenchano a quien le pl'esen- dió que le habían dado el tamaño jicaron de iaron el guacal padrote de la casa lleno de guarapo para qUe el lenchano se viera pre– chicha popiada para que Se 10 remp\fjara. cisado a dejC,l.r' un poco de lB alegradora chi-

cha y si tal cosa hubiera acorliecido como la Daniel vio la desmedida medida y de ofensa iba a a er inferida al hijo político de la hecho comprendió que zampársela, era rodar ex-sirvienta amasia, Daniel hubiera fenido que al poco rato al suelo, presumió que la aten- abandonar la posadCl. de Matej.to tan luego re– ci6n tenía mucho de maldad y le hU:biera fe-gresara de la chichada, porque e!ilO sí, Juan nido que dar fin ha!il±a el fondo si no ha llega- R()ch~ pudiera disimular cualquier ofensa me– do La Luz a sacarlo del apuro, diciéndole de nos qUe 10 despreceyen y a €lSO equivale el pronto: . dejar sobras entre lOl> jinchos y por supues- -Hombré, Di:miel, con semejante nambi- fa l;\].lbie ra reclamado en la misma noche la ro zampado en la barriga vas a rodar como qorrida del chavala que lo había ofendido de iallo de guineyo cariado de un pencazo, echá-

ielo para acá para a yudarie y para. que te :tan semejanfe manera.

atuteye Maieyo también y juntando a lo dicho Todo el re!ilto del día fue invedido en una la acción cogió el guacalofe y principió a be- prolongada guarapeHada la que concluyó has– ber hasta que le apeó dos df3dos al jicarón, ta que rodaron fodos como cepas de chagüiie luego se lo pasó a Mateo que le bajó otro tan,. que hubiera trastl.lmbado un huracán, des– to, en seguida éste se lo volvió, a GU;i!:mán pués el que se iba despertando se iba pane– quien apuró el resto, pero mermado por lo riando a su posada y a' las tres de la mañana Inenos en unos ires litros y su pico. solo la Luz ocupaba con sU cuerpo un refazo Es costumbre indígena que cuando algu- del patio sobre del cual había rodado la ma– no visila una casa se 'le debe de obsequiar yoda 'de los parranderos y para conienfo y sa– una bebida y el visitante está obligado a dar- tisfacción del festejado como siempre en sus

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