Page 55 - lista_historica_magistrados

This is a SEO version of lista_historica_magistrados. Click here to view full version

« Previous Page Table of Contents Next Page »

Ante la mísera situación de esie hos– pital, considerado casi como casa parficu– lar de oaridad, dirigó el Cabildo de la ciu– dad en 1779 una solicitud al Monarca por medio de su apoderado don Luis Melchor Colomo, exponiéndole la necesidad de que doiara a la ciudad de León, de un hospüal que llenara con suficiencia, el fin de su insiitución pues si había un hos– pital, no podía por sus escasos recursos aiender como se debí~ a la gran caniidad de enfermos pobres que había en el lu– gar. Además se le hacía. ver, el daño que se sufría, con la faUa o carencia de un médico y de una bo±ica, necesarios com– plemenios de un hospital. Para realizar la creaci6n del hospital, se indicaba en la solicitud, dos proyecios o arbitrios] pero no fue atendida la jusia reclamación.

En esta trisie condición económica, lleg6 el Hospital de León, al año de 1824, en el que, los Reverendos Hermanos de San Juan de Dios junio con iodas las de– más Ordenes religiosas, fueron expulsados por ¡o cual, se organizó una Junta espe– cial de Caridad o Beneficencia, para su dirección y administración] ya el hospi~

fal, con el solo nombre de "Sart Juan de Dios". .

Después, con el correr del tiempo, llega a Nicaragua la meri~oria fama de la obra santa de las Hermanas d,e la Caridad, y la sociedad de León, por medio de un grupo de señoras pide al Ilmo. Sr. Obispo de la diócesis docior don Manuel Ulloa y Calvo, que de acuerdo con el señor Presi– denie de la República, haga venir a esias Hermanistas para que se hagan cargo de la dirección del Hospital. La petición es acogida y llegan a León en 1875.

De esta época en adelante, sólo Sor María Teresa Lautoig, nos puede dar los datos precisos y bellos, cual ninguna otra pluma lo pudiera hacer] y con la venia de su alma en la excelsa morada del Cie– lo, los insedo así:

Detalles del Hospital

"Hace algún fiempo se expresó el de– seo de tener una Memoria sobre el anti–

guo Hospital (San Juan de Dios) y el nue– vo (San Vicente). Pocas personas han quedado para suminisfrar datos. Con gus– :to emprendo ahora este trabajo, según mis alcances: poco versada en el idioma español, escasa de visia, la mano pesada, me ha animado a hacer lo que puedo, no dudando que nU esfuerzo será acogido con indulgencia.

El6 de Agosto de 1885 tomé la Direc– ción del Hospital San Juan de Dios, reem– plazando a Sor María Madaure, que fue

la 'primera Superiora, y la cual fue llama~

da de Guatemala por causa de enferme– dad, después de haber estado al frente del Es±ablecimiento durante diez años.

Del la~o de la calle, corno está hoy, existe una capilla basiante amplia para el Hospital, y donde hay misa los domingos para el vecindario. Tenía cinco alfares: San Juan de Dios, Nuesira Señora de Do– lores, San José, Nuestra Señora de Monse– rra± y San. Rafael; hay dos SEtcristías y un pequeño pafio] en la primera había un bufeie para los vasos sagrados, un mue– ble grande para los ornamentos y un gran Sanio Cristo; en la segund,a, ires roperos para flores.

Después de la entrada, la primera pieza era el recibidor, que servía también de Sala de Junta para los dociores y es– tudiantes.

La pieza que seguía era la botica, muy estrecha, dividida en dos] después, estaba la bo±ica externa y un cuarío para el boficario, donde estuvo después la ropería.

En el segundo pafio, a la derecha, se eúconiraba la Sala de Cirugía seca y algo ventilada, con una división para las cu– raciones, e inmediato al zaguán estaba el cuado llamado de los muerías.

A la izquierda se encontraba una gran sala oscura, sin ventana y húmeda en extremo, un corredor esfrecho y un co– cinero. Era la sala de Medicina.

Seguía un pafio como de seis varas de ancho y un poco rnas de largo¡ en una extremidad había un pozo y en la otra es– taban los excusados, un. baño pequeño y un cuarto para la ropa sucia.

A continuación estaba la salita de mujeres, que consístía en una píeza larga

y angosta, conteniendo treinta camas. Se– guía un cuario para las operaciones, un baño y un pozo. El corredor era angosfo, de modo que cuando llovía bastanie en– traba el agua a la salita. También exis– tían un cuar±iio para ropa sucia, dos rape.. ros para ropa limpia, y a un lado, un cuartito para una loca.

El Hospital estaba provisto de camas en muy Inal estado, y varias tenían las patas quebradas, las cuales eran reempla– zadas con ladrillos de barro. La ropa de cama consistía en una almohada con su correspondiente frazada. Había seis co– modines para los enfermos más graves. No se conocían las sillas.

La cocina se encontraba en el mismo sitio donde está hoy] y junto a ella se ad– quirieron por compra unos cuados para dormitorio de los empleados y para guar– dar provisiones.

Después de la sacristía estaba la habi~

tación de las Hermanas, donde hay ahora

~22-

Page 55 - lista_historica_magistrados

This is a SEO version of lista_historica_magistrados. Click here to view full version

« Previous Page Table of Contents Next Page »