This is a SEO version of lista_historica_magistrados. Click here to view full version
« Previous Page Table of Contents Next Page »les la ansiedad y las ~eurosis son más -frecuentes en los , l' civilizados y en la gente culta. Pero no hay esta-pases" hh .
d' fcas que confirmen este ec o comparativamente con
l~: Ipaises sub.desarrollados Y la población miserable e Ignorante. •
El punto neurálgico de la cuestión est;i en evaluar f,;lses' como las sigl,lientl!s: "no me da, apete~cia porque
.105 frijoles y el arro:l' me aburren, los he. c~mláo toda la 'vida y me retuercen el estómago; solo qUIsiera comer co·
s~s sabrosas"; "como padezco de aire en el cuerpo, me pongo siempre tacos de algodón en los oldos, para !fue no me entre más aire"; "quisiera gritar, es una aflicción horrible que quisiera salir corriendo, no tengo en la casa nI una palabra de cariño". la primera frase implica PO, BREZA y MISERIA, la segunda revela IGNORANCIA Y PREJUICIOS y la tercera, es el equivalente fiel de la IN· FELICIDAD.
La Medicina Curativa en este grupo humano nicara· , g¡'¡,ens~ es una ilusión. Un pueblo infe1iz es un pueblo 'enfermo. En otros términos, quien no disfruta de felici, dad' y bienestar, no puede, ser s;lno. la, verdad de esta asever¡¡ción es un dato primario de obs'ervación compro– báda diariamente por nosotros los médicos.
La ignorancia, la infeli~idad y la educación inade· cuacIa, Son las bases de las alteraciones emocionales y de la lln!Justia de nuestra población. la desnutrición, el hambre, el desamparo sanitario y la incapacidad de sub. sistir y elevar el nivel de vida, soh asimismo básicos en la patogenia de la infelh:idad. "
Cuando estos problemas puedan resolverse satisfac. toriamente, lograremos un grado de prosperidad positiva qlle proporcione IIn bienestar real a nuestros pacientes. De lo contrario los médicos que ejercemos mediCina cura. tiva individualista, cargaremos con la responsabilidad, a veces la cul,pa y otras la incapacidad de conseguir la cu.
r~ció~ de. alte~aciones emocionale,s y angustias, y defi– Ciencias blol6glcas de una poblaci6n a la que el Estado . no ha puesfO debida atención. Corresponde a éste y no al cuerpo médico, la responsabilidad sobre estas enfer. medades que obstaculizan y desprestigian /a Medicina Nacional.
Ac~nsejar la res.ignación y el sacrificio, y predicar la adaptacu$n a estas cIrcunstancias es, además de inmoral fUera de los objetivos de la m!!dicina cíentífica. ' " Gottschalk H. (1960) (7), psicólogo danés, en su aná.
11515 del problema del bienestar, establece que éste debe ser atendido desde un punto de vista fisio,lógico y bioló– gico por una parte, psicológico y sociológico por la otra. Desde el ,punto de vista socioló~ico un buen comienzo seria hacerse una idea de conjunt~ de los deseos del hom– bre. Gran húmero de estos deseos son en realidad de. seos de masa o colectivos, y la satisfacción de ellos !raería en cierto modo, una sensación de bienestar El IIlVent . d Id, . l" 'd' a,rl~. ,. e ~~ ~seQs debería correr parejo con un aná.
ISIS e nivel de bienestar. , '
d 'd Un~ mabnera d~ ¡IIzgar el grado de bienestar o felici. a seria o servar sus' b" ' '. SIgnos o ,etlvos. La persona que
::e~~el'lte bl~n, canta, ríe, silba, es comunicativa y fácil. Con e u~cceslble y. muest~a un buen hábito exterior. (7)
ta.... e~ . f~ecuencla observamos nosotros los médicos es. .. xpreslon s ..., .
tes t b . d e anlmlc~s e!1 nuestros pacientes indigen· , ra ala ores y obreros? '
El grado d 'nf l' "d e I e ICI ad pudiera juzgarse por la fre-
cllencia con qlle el individuo se ve en público, por los conflictos y situaciones desagradables que provoca en la calle, en los espectáculos públicos, en las ventanillas de correos, bancos, taquillas, etc., en las aglomeraciónes en general.
Allí, como en el consultorio médico se juzga el grao do de edllcación, de' cuUllra, disciplina, carácter y grado de contento del paciente.
La ignorancia y la infelicidad crean cuadros clínicos especiales tanto físicos como emotivos. Estos cuadros son tan múltiples que escapan a IIna clasificación adecuada. Un estado de Infelicidad continuo modifica el potencial eléctrico de la piel, la velocidad de la corriente nerviosa, la concentración sanguinea y urinaria de ciertas sustan– cias; prodllce variaciones en el funcionamiento glandlllaj;. Las emociones determinan la dilatación o contracción de las arteriolas por medio de los nervios vasomotores. (6) El placer produce rubor de la piel. La ira y el miedo la vuelven pálida y fría. Las malas noticias pueden dar lugar a espasmos de las coronarias, anemia cardiaca y
muerle. Los estados afectivos, actúan sobre todas las glándulas, aumentando o disminuyendo su secre~ión.
Cuando se provoca un 8flado de miedo en el gato, como hi:J:o Cannon en su famoso experimento, los vasos de las cápsulas suprarrenales se dilatan, las glándulas secretan adrenalina y ésta aumenta la tensión sangulne., la rapidez de su circulación y prepara a todo el organismo para el ataque o la defensa. (6)
Igu;llmente el odio y el deseo cuando son constan– tes, producen alteraciones orgánicas y verdaderas enfer. medades.
Suponiendo al tipo, nicarag~ense especialmento sensible, las e~ociones crónicas pueden determinar en él, notables modificaciQnes de los tejidos y do los humo· res.
El cabello de una mujer belga condenada a muerte por los alemanes, ~e volvió blanco durante la noche que precedió a la ejecución. Carrel (6} cita a Joltrai"', al de– mostrar que un choque moral pUl¡lde causar cambios marcados en la sangre. Después de haber experimentado un gran terror, un paciente sufrió una calda de la tensión arterial, disminución en el número de leucocitos y en el tiémpo de coagu1llción. Durante un bombardeo, apareció una erupci6n en el brazo de una mujer, cada ve:l' que es– tallaba una granilda la erupción Se extendia y se volvía más roja. '
la falta de seguridad, la intranquilidad y la agita. ción crean estados de conciencia que acarrean trastornos nerviosos y orgánicos del estómago e intestino, nutrición defeetuo$B y el ,paso de microorganismos intestinales al aparato circulatorio. Las colitis y las infecciones urinarias son los resllltados lejanos del desequilibrio mental y mo. ralo (6)
Donde la vida es sim.ple, estos padecimientos no se conocen. Pero donde la vida /JS insegura e intranquila y
donde la ansiedad es cr6nicamente activa, como en el gru– po étnico que tratamos de estudiar, esfos padecimientos son endémicos..
Otra prueba evidente de
'o
que la tensión aguda o crónica puede provocar en el organismo humano, puede el lector encontrarla en la REACCION DE ALARMA Y EL SINDROME DE ADAPTACION DE SELYE. (8)
la ignorancia crea medios peculiares de expresión y
-37-
This is a SEO version of lista_historica_magistrados. Click here to view full version
« Previous Page Table of Contents Next Page »