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Poder al Partido Liberal. Son los mismos Conservadores los que se encargan de abrir las puertas ni Liberalismo pa,a eo"quisla,' el Pode" ~I p,opio dia de la eleeció" P,e, sidem:ial da un DeC'reto de Estado de Sitio, encarcela a

los ciudadanos que votan por el General ~miliano Chan

HUlrfO. ~Ilcarcela a los Senadores don leopoldo Salazm, dacio, David Sladlhagen ele . ~n las ,pue'las del Con– greso coloca a una serie de asesinos para (1ue vapuleen

a los Representantes Conservadores. El Liberalismo tie.. ne vía libre y ha logrado la división del Partido Conserva· dar. El Partido de la Transacción es más enemigo del Par– tido Conse,vado, que del Pa,lido Libe,al Republicano, que Jefea el Dr. Luis Felipe Corea. Así observamos las Juven~

tudes Conservadoras, la caída del Partido. Después viene la ,evolució" del año de 1926. ~I Gene,al ~milia"o Cha, morro, en todas partes, ha derrotado a las fuerzas del U–

beralismo El Gobierno Americano le notifica que debe de abandona, el pais y ent,ega, el Pode, a don Adolfo Día. y ¿qué pasó? .. Al despedirse el Gene,al Chamo– no, dice: Ufortifique U UMatiguás'J uLa Chompipa u y too da la Co,dille,a de Ma,abios. 1'0' ese lado lieM que entrar Moncada con su E¡ército, que viene cansado y sin ninguna fortificación". El General en Jefe de aquel en.. tonces, también Conservador, desobedece las órdenes del

Jefe y "qué pasó? La pérdida del Pode,.. pa,a que mas tarde viniera el General Anastasio Somoza García, con el apoyo del mismo General que había reth'ado al Ejército Conservador, a consolidarse en el Poder y edifi.. car la Dictadura Dinástica más dolorosa que ha tenido Ni .. caragua. A tas Juventudes Conservadoras dedico estas cuartillas pala qUé de ellas observen que la división polí. tica de un partido es más costosa que la Oposición de

un adversario.

la mujer nicaragüense, desde la valerosa ¡oven Ra.. fa,ola Herrera, pasando por doña María de Peña losa y do–

ña Luisa Chamorra, esposa de don Juan Argüello, ha sido

uno de los factores decisivos en la política del ,país. El General José Santos lelaya, creador del Jldasis– mu" en los primeros años de su gobierno era un hom..

bre popular. Nos cuentan los que vivieron en esos días

y presenciaron esas cosas, que para ser "popular" en Ma..

nagua, se tenía que ir a caballo a Santo Domingo, asistir

a las lidias de gallos en la Jlgallera" de los Estradas, etc. etc., porque esto hacía lelaya y había que imitar lo que

éste hiciera.

Mas un día de tantos, el Dictador cambia total mente de política. El ¡oven granadino don Joaquín Pasos contrae matrimonio con la hija mayor del General lela.. ya, la distinguida señorita Juanita lelaya. En la fiesta que siguió a las bodas, el Conseje,o del Gobierno, don José Dolores Gámez, se le acerca al General lelaya y le

dice: JlGeneral, prindpiamos él casar nuestras hiias con Conservadores ya verá que pronfo les entregaremos el 1'0de,l"

Con el mal,imol1io de Joaquin Pasos y Juanila Zelaya ¡principian los ~stradas él resentirse. I:s tan llrofundo el

resentimiento que gustosos se prestan para conspirar en eo"l,a del Dictado"

En Managua existía entonces un Club de Artesanos, llamado "La Moderna", A esle Club pe,te"ecían los Es-

"'adas, los A,andas, los Mo,ales y loda la clase media de Managua. El Genei'al Juan J. Estrada convence a Zelaya que lo envíe como Intendente a la Costa Atlántica y que

él se lIeva,á a muchos de los miemb,os del Club, para así aleja,los de la Capilal donde se habían vuello un dolo, de cabeza. para el Dictador.

Al llega, a la Cosla Allánlica, ~sl'ada forma su pro– pio P,;¡rtido y de la circunstancia de su resentimiento con el régimen nace la Revolución de la Costa, que más tafo de, después de una cruenta lucha, derrota la tiranía de

Zeraya

Uno y otros piensan si esta Revolución es Conserva; dora o liberal. Mas esta revolución tan sólQ se concreta a un fin determinado: destruir el régimen de opresión y

tiranítl La bandera que trae la Itevolución es bandera

que únicamente predica la destrucción del lelayismo El a,póslol del Liberalismo, el docto, do" José Madriz, cree detene.. la Revolución mas se le hace imposible. La raZón es obvia, Madriz ha creído sostenerse en el Poder COn la bandera del Zelayismo, bandera que estaba desprestigian da nacional e internacionalmente.

Igual cosa nas sucedió a los Conservodores en los

años tUI'bulentos de nuestra caída. El Conseiero de Go~

biel no de don Bartolomé Martínez, el doctor Segundo Albino Román y Reyes era casado ca" la dislinguida ma– I,ona doña Nil1fila Vega, sob,ina dilecta de don Ila,tolo, La polílica ma<¡uiavélica del lalenloso doclor Román y Reyes le si,ve de brú;ula y soslé" al P,esidente Martíne. para romper con los hombres que dirigen la política del Pa,lido Conse,vado" D0" lla,lolo lleva al ,poder a don Carlos Solórzano como Presidente y al dodor Juan Bautis~

fa Sacasa, liberal, como Vice-Presidente.

E" el efíme,o gobierno de don Ca,los se 110la la in– fluencia decisiva del doctor Il.omán y Reyes, quien desem..

peña la Cartera de Hacienda, mientras su tío político, don Bartolo, desempeña el Ministerio de Gobernación. Todo el Gabinete de don Carlos Salórzano está dominado por liberales. Esto es, que los mismos Conservadores nos he–

mos encargado de construir nuestra prOlpia ruina.

1::1 General I:miliano Chamollro se ve forzado a tomar

la iniciativa de impedir la caída del Partido y da el JlLo_

ma.o" del 25 de Octub,e de 1925, el que en vez de im, pedh' provoca el derrumbe del Conservatismo.

Muchos hablan y dicen que el Gene,al Chamo,,,, pu– do hélberse mantenido con las armas y que don Carlos hu– biera aceptado ser un Presidente titular. Nada más le;os

de la ve,dad, ~s ve,dad que don Carlos decía u"a vez una COsa y al otro día otra, pero sus tías R.ivas eran factor decisivo en su Gobie'no y ellas eslaban muy lejos de per– mitir una posición desairada para su sobrino.

En esta difícil situación, el Gobierno Atneric<~no in–

terviene. Aconseian al Partido Conservador el derroc~~

miento de don Carlos bajo condici6n de que el Presiden

a

le sea don Adolfo Día.. Se crea la Co"slabula,ia y se pro– pone como Primer Jefe al General Humberto Pa~os Díaz. El General Chamarra se opone él ese nombramiento. El

Partido Conservador se encuentra tremendamente divi– dido. Los hombres de nuestro ¡propio Partido se han en.. cargado de cavar su p.ropia tumba.

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