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Dr. Juan B. Sacasa

Dr. Carlos A. Morales Dr. Hildebrando Ca.to1l6n

los revolucionarios, es decir, los lugares de de- y su grupo darse cuenta de la situación de la sembarque en Nicaragua, las varias fechas de Sucursal del Banco Nacional en aquella ciu– salida, y los noITIbres de los jefes encargados dad y un día de tantos determinó asaHarlo, de las fuerzas expedicionarias. llevándose todo el dinero que allí había, hu-

Así es que si yo, en lugar de haber envia- yendo después con sus amigos en todas direc– do solamente quinientos dólares, hubiera en- ciones. Beltrán Sandoval se fue a México a viado los cinco mil solicitados, es muy proba- engrosar las filas del Dr. Sacasa, mientras que ble que mi amigo en cuesiíón, hubiera cumpli- Carlos Pasos y el General Navarro, que tam– do su promesa, esto es, que la expedición no bién estaba en el número de los asaHantes, se hubiera salido de México. quedaron en Guatemala, de donde regresaron

Refiero esto para que se vea que en cues- más tarde con el General José María Monca– tiones de estado, no hay que ser muy descon- da, que por enfonces estaba en Cpsta Rica. fiado. En México se habían reunido al Dr. Saca-E12 de mayo de 1926 el Coronel Luis Bel- sa lo que puede considerarse la plana, mayor trán Sandoval a la cabeza de un grupo en el del Liberalismo: el General Julián Irías, el Dr. que figuraban entre otros, el ahora General Manuel Cordero Reyes, el Dr. Hildebrarido Carlos Pasos, Hildebrando Correa, Diegp Na- Castellón. En aquel país habían logrado inte– vas, asaHaron el cuartel de Bluefields y di6 el resar a su Presidente, el General Plutarco Elías grito de rebelión en la Costa Ailániíca. Calles, para que les diera apoyo para su mo-Con la eficaz ayuda de su concubina Lu- vimiento revolucionario. Calles se los dió en eila "Chila" Delgado, logró BeHrán Sandoval la forma de armas y pertrechos de guerra, di-

nero en efectivo y tres barcos: el CONCON, el FOAM y el TROPICAL.

En Guatemala se encontraban, el Dr Car– los A. Morales, don Crisanto Sacasa, el general Sarnuel Santos y el general Carlos Pasos.

Después de recibir el apoyo de México el Dr. Sacasa se dirigió a Guatemala y llamando al General Moncada de Costa Rica, lo puso al

frente de su m.ovirniento.

Mientras tanto yo había enviado al gene– ral José Solórzano Díaz a recuperar Bluefields lo que logró inmediatamente a su llegada des–

pués de un ligero encueniro con los pequeño5

grupos de revolucionarios que habían queda– do abandonados por sus jefes principales.

Con eso la paz se había momentánea– mente restablecido, sin embargo, la conspira–

ción exterior e interior continuaba.

El Tamarindo, o sea donde está actual– menie Puerío Spmoza, sería uno de los luga–

res escogidos por los revolucionarios para el

desembarque de la expedición. Despaché pri– meramente a ese lugar al Coronel Tomás Sa-

D1' Julián 11 13s baría con un pequeño grupo a realizar una Genelal Callos Pasos

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