This is a SEO version of lista_historica_magistrados. Click here to view full version
« Previous Page Table of Contents Next Page »ron jueces de otros lugares, para que con su ejem– plo mostraran lo que es y debe ser un Juez. Critican esa proposición y por ello sugiero que se envíen jó– venes que tengan buenos antecedentes a otros paises, a estudiar la carrera judicial, para que comience así la renovación inmediata del personal actual.
Punto de excepcional importancia es que los jue– ces tengan salarios que les aseguren su vivir y el de sus familias para que no puedan llegar a su Despa– cho ton la angustia de las tribulaciones de los suyos o las propias de él mismo.
Que los Magistrados tanto de las Cortes de Ape– laciones como de la Corte Suprema enseñen a los jue– ces cómo dignificar su cargo, y les instruyan para que se presenten COn seriedad, y eliminen las guaya–
bera~, la falta de corbata y otros defectos en el ves– tir que hace que no se guarde respeto a dichos jue– ces. Visitas periódicas y de inspección serían de gran– dísima utilidad.
Que los jueces tengan independencia y liD estén sujetos ni atados a influencias ni a recomendaciones.
y por fin que los jueces tampoco sean nombra– dos por el sistema de intrigas, recomendaciones u ór– denes, sino que los cargos judiciales por ahora y mien– tras no se cambie radicalmente el sistema de su elec– ción, se designen entre aquellos que soliciten esos cargos, sin secretos ni pláticas entre bastidores.
El hombre de la calle, los empleados públicos, los partidos dicen discursos, hablan, gesticulan, gri– tan, luchan y pelean por el poder público, pero olvi– dan que todo descansa sobre la Justicia: que si ésta no existe todo el andamiaje nacional cede y ninguno institución puede crecer ni desarrollar. Hay que lu– char por la Justicia para que pueda haber paz, para que pueda haber tranquilidad, para que haya pros– peridad, para que exista uno Nicaragua. No tendre– mos Patria, mientras no haya Poder Judicial propo y honesto.
NICARAGUA,
PAIS QUE NO PROGRESA
EllO de Noviembre de 1918 el Gobierno de Ni– caragua actuando bajo la presión de necesidades d~
carácter internacional promulgó la ley de esa fecha en la cual se dispuso que las Compañías, corporaciones y
súbditos de 105 Imperios Centrales de Europa no po– drian presentar reclamo!;, cobros, demandas, ni ejecu– ciones hasta tanto no fuera proclamado que se había negociado con tales Imperios un Tratado de Paz. Esa fue la primitiva Ley de Congelación de Fondos, que fue redactada como consecuencia de una necesidad de ca· rácter nacional y la cual, en aquella época, satisfizo los deseos del público en general.
Con el correr de los años, y siendo Presidente de la República el General José María Moneada, ante la pre· sión del público que solicitaba a los Bancos divisas que no podían venderles, y sobre todo ante la presión del acreedores extranjeros que reclamaban, sin conseguirlo, el envío en dólares de las cobranzas ya efectuadas aquí por los Bancos locales, y cuyo valor habían recibido en c:órdobas, el Gobierno se vio en el caso de proteger a
105 Bancos, o mejor dicho al Banco Nacional, y emitió la ley creadora de la Comisión de Control de Operacio. nes de Cambio y suspendió la libre contratación y ne– gociación sobre divisas y sobre el oro. En esa forma los Banco~ para no remesar, tenían la excusa de que pa. ra hacerlo necesitaban permiso de un órgano del Go– bierno, el cual permiso naturalmente no se les daba. De entonces acá y durante treinta años contínuos, el Go– bierno ha cambiado las leyes, ha cambiado el nombre
de los Organismos controladores, ha cambiado el per– sonal de los mismos, pero inflexiblemente ha manteni– do el estado de emergencia económica, que nació con motivo de aquella Ley controladora de Cambios. Los co– merciantes jóvenes se han desarrollado en eSa atmósfe– ra de opresión económica, de restricción a la libertad co– mercial y la mente y el cerebro de todos ellos ha sido lavado en forma tal, que cuando al presente se les dice que se van a quitar las limitaciones de las importacio– nes, que cada quien podrá importar lo que quiera, que ya no será necesario llevar los pedidos para que los re· gistren y den permisos, que ya no será necesario hacer depósitos previos, y que cada quien podrá disponer de su crédito personal como pueda hacerlo, entonces todos esos jóvenes comerciantes en un grito unánime de pa– vor, levantan las manos y claman al cielo diciendo que si tal COSa sucede, sobrevendrá la ruina para todo el ca· mercio, que el exceso de importaciones causará la quie– bra de todos los que están en el comercio, que vendrán importi!dores improvisados, que el Banco ya no tendrá dólares, que la moneda se irá al suelo, que el Gobier– no no podrá atender sus pagos y que el desastre será inevitable, para todo Nicaragua. Es el mismo grito que daban los esclavos cuando se les hablaba de que que– darían libres. Es el mismo grito de los jóvenes rusos que han nacido y se han creado bajo el régimen comu– nista y que créen que el ambiente en donde se han de– sarrollado es el único razonable y bueno.
Las leyes de emergencia económica que se han
-28-
This is a SEO version of lista_historica_magistrados. Click here to view full version
« Previous Page Table of Contents Next Page »