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DOÑA PALMIRA Todavía hay almas puras

(A Juanelo)

JUANELO Sí, señora, todavía no ha acabado de perderse el mundo.

DOÑA PALMIRA (Pero si Peregrina le atra-pa )

LUCRECIA y U, (A Marcos) según he oído

decir, es médico

MARCOS Sí, (con petulancia y pasándose Jo

mano po rfos bigotes) hoce cinco dfas que me exten– dieron el diploma de Doctor soy especialista DOÑA PALMIRA ¿En qué enfermedades? MARCOS En enfermedades del pecho y de la laringe

CHON Vea, mamá

MARCOS ¿Qué? Padece U del pecho? CHON No, doctor es mi mamá

MARCOS ¡Cómo, señora! (a la hotelera y le-vantándose) ¿Acoso s ufre U a consecuencia de alguna colisión de los músculos vitales de la epidermis pletórico-pulmónica? (Se llega a /0 hotelera y /e pone

el oído en el pecho) Es nada apenas una rama in– terna y celular del pulmón izquierdo no corresponde con el esófago de la laringe U se curará con un jo-

robe de acetato de forfina El acetato se mezcla con agua acidulada, petO yo se lo preparé (Sr¡. sienta con

aire satisfecho)

DOÑA PALM1RA ¿No hay peligro?

MARCOS ¡Oh! ninguno, si con tiempo se evita una pitiriasis de los glóbulos intestinales, pero no se preocupe U. (Tose)

CHON ¿Y U ? (a Jesús)

JESUS ¿Yo, señorita? De nada padezco (esto en voz baja y sólo a Chon) como na sea de cierto in– comprensible malestar que desaparece ante el fuego de esos ojos

CHON No es eso ro que le preguntó, sino cuál es su carrera

JESUS ¡Ah, mi carrera! Señorita, yo soy Afri-me"sor e Ingeniero Mecánico y Tipógrafo ¡TOpógrafo! MARCOS Al servicia de la patria JESUS. Todavía no

DOÑA PALM1RA ¡Hermosas carreras!

JUANELO (Mejores son las que yo he dado para pescar el empleo que tengo)

DOÑA PALMlRA ¿Y U, Juanelo?

JUANELO Yo pues yo soy Oficial J9 de uno de los Ministerios, además, guardo muchos proyectos JACINTO Un destino que mucho le cu"'sta y que lo merece

JUANELO (Más le cuesta al Tesoro' Un des-tino, señora, que lo debo a la Martirologio, porque, doña Palmira, aquí donde U me ve, yo he sido mar–

tirólogo

DOÑA PALMIRA ¡Martirólogo! ¿Qué es Mar-tiro/ogía?

JUANELO Martirologio, señora, es una ciencia política muy en boga en estos tiempos de sacrificios, de abnegación, de igualdad la ciencia entre las cien– cias, la ciencia morlirológica (que pudiéramos llamar también la ciencia estomacal).

DO¡\JA PALMIRA. No le entiendo

JUANELO Seré m6s claro Antes de Jo revo-

lución que dio en tierra con el pasado régimen . MARCOS Gloriosa-revolución que cual huracán

rasgó las densas nieblas que obscurecían el cielo de la patria .

JUANELO Antes de esa revolución, yo era un opositor espantoso hablaba, gritaba, vociferaba con– tra el Gobierno, y como casi siempre estaba en ciertos relaciones con la policía, casi siempre iba a parar a la chirona

DOÑA PALMIRA ¡Jesús!

JESUS ¿Qué se te ofrece? (a la hotelera)

DOÑA PALMIRA Nada, joven, es U. muy tonto

JUANELO Pues bien, señora el día siguiente, la prensa que adversaba aquel orden de cosos me pin– taba como un mártir de la libertad, como un avanzado

martirólogo ¿Me entiende U ahora? DOÑA PALMIRA Ahora sí

PEREGRINA (A Juanelo) Y entre esos pro-yectos que U guarda, ¿no está el del sacerdocio? JUANELO ¿De qué sacerdocio me habla U, señorita? Porque la Martlro/ogia distingue varios el de las ideas, el del progreso, el de la igualdad, el de la libertad, etc

MARCOS Sacerdocios que se resumen en uno solo que podríamos "amar el extracto de Jos sacerdo·

cios el sacerdocio del patriotismo

PEREGRINA Me refiero al de don Jacinto (mi-

rando a éste)

JUANELO No, señorita, aunque un tío Que me crió quiso hacer de mí un clérigo modelo DOÑA PALMIRA ¿De veras, Juanelo? JUANELO Sí, señoro, y vea U por qué yo teníó uno buena cualidad para ser cura-cualidad que aún conservo

DOÑA PALMIRA ¿éuál? JUANELO Comía mucho

JACINTO Gracias p<?r la sátira, Juanelo JUANELO No te enojes, Jacinto

.. MARCOS (Poniéndose de ¡5ie) ¿Nos retiro. m¡;>s? (o sus amigos) .

DOÑA PALMlRA ¿Por qué, tan pronto? A no ser que quieran pasar al jardín

(Ya se han levatitado /05 otros)

JESUS Si las señoritos nos acompañan DOÑA PALMIRA Con placer lo harán LUCRECIA Al jardín, pues (Se pone de pie) (Igual coso sus hermanas)

PEREGRINA ¿Vamos? (a Jacinto)

JACINTO jOh, sí! Tol vez lo despedida del mundo! (a Peregrino en voz baja)

PEREGRINA ¿Por qué? (con amabilidad)

JACINTO Mi destino, mi vocación, la Iglesia. JUANELO (Acercándose a Marcos y en voz

baja) Acuérdote de la rifa, ni un paso hos dado MARCOS Pierda cuidado

(Salen del brazo, Marcos y Lucreda, Jesús y Chon, Jacinto y Peregrina Juanero hace ademán de salir, pero se detiene)

JUANELO (La vieja como que no va, la ~ntre'

tendré).

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