Page 81 - RC_1966_09_N72

This is a SEO version of RC_1966_09_N72. Click here to view full version

« Previous Page Table of Contents Next Page »

los americanos al derecho y a la justicia, podría encon– trarse una muy evidente en el solo hecho de que Mateo Pineda los acompaño lo mismO en la buena que en la mala fortuna

Cuando los rifleros llegaron a Nagarote se pusie· ron en marcha hacia Masaya con los batidores y el batallon de infanteria En Masaya encontraron al co– mandante del lugar, José Hel rera, firme en su lealtad a los americanos, y así permanecio hasta la muerte, a pesar de los esfuerzos de un hermano suyo para des–

viarlo de la senda del deber militar fue e\ec.lJto.do

poco después por los Aliados, en viltud de sentencia dictada por un consejo de guerra y a causa de su ad· hes ion a los americanos

Al llegar a Granada, el general en jefe publico un decreto reorganizando el gobierno provisional en viro tud del tratado del 23 de octubre Este convenio ga– rantizaba a los nicaragüenses naturalizados los mismos derechos que a los naturales del país; pero el presi– dente y sus ministros lo habían violado tratando de hacer diferencias en perjuicio de los ciudadanos natu. ralizados. Walker no solo habia jurado cumplir el tratado, sino también hacerlo cumplir El era el único garante de Rivas ante Nicaragua y ante el mundo y habria merecido el estigma de perjuro permitiendo que éste no solo excitOla impunemente las pasiones del pueblo contra los americanos, sino que llamase al ene– migo extranjero para expulsar del país a (os ·soldados naturalizados Además de los deberes que le incum– bíCln por motivo del juramento que presto de hacer cumplir el convenio, se le habían dado facultades omnímodas pOla proteger los departamentos Oriental y Meridional con1ra los enemigos externos de la Repú– blicq; pero ¿como era posible hacerlo teniendo que respetar las ordenes del poder político que les abrian de par en par las puertas del país? Por estas razones se nombro al comisionado en los departamentos Orien– tal y Meridional, D Fermín Ferrer, presidente proviso– rio mientras elegía el pueblo su gobernante en virtud del decreto emitido por Rivas ella de junio El mis–

~o día en qu~ fue publicado este decreto, Walker lan. zo ,un manifiesto al pueblo de Nicaragua en que des-o pues de relatar los actos del gobierno de Rivas termi– naba diciendo:

"POI haber cometido tantos crimenes, conspirando contra el mismo pueblo que tenía la obligacion de proteger, el extinto gobierno provisional no merecía seguir existiendo Por consiguiente, en nombre del

pue~lo lo he declarado disuelto y he organizado un gobierno provisorio mientras eierce la nacion el dere· cho natural de elegir a sus gobernantes"

Con arreglo al decreto del 10 de junio, la eleccion del presidente se hizo el cuarto domingo del mes y en los dos días siguientes La votacion fue general en los

d~~artamentos Oriental y Meridional; pero como D Pa– trrclo .Rivas derogo su propio decreto después de llegar a Chmandega y los guatemaltecos habían atravesado ya la frontera norte del Estado, no se voto en el de– partamento de Occidente La gran mayoría de los

~otos emitidos resulto en favor del general en jefe, y t e d er , el presidente plovisional, al proclamar el resul·

~ o .~e las elecciones, fijo en un decreto la toma de p se;slo~ del presidente electo para el 12 de julio Por

d:nslg~lent~, .en la fecha fijada y con las cer~monias

lci ¡stllo, CIViles y religiosas, Walker. jurO ~u cargo en . p aZ(:j mayor. de Gran~da y tomo posesi()n de, ¡el ie-

fatura del poder ejecutivo de la República de Nicara. gua

Pocos días después de publicado el decreto del 20 de junio, arribo al puerto de San Juan del Sur ia goleta costarricense San José, mandada por Gilbert Morton Mariano Salazar la había comprado a Alvarado, el an– terior propietario, y cedio nominalmente la mitad de la propiedad de la goleta a Morton, imaginándose que así podría adquirir ésta el

i derecho de llevar la bande– ra americana El vicéconsul de los Estados Unidos en El Realeio. un tal Giauffreau, dio a la goleta lo Gue Morton llamaba una patente para navegar; 1 según todos los informes recibidos el viteconsul era tan igno– rante o tan negligente en el cumplimiento de sus de– beres, que permitio al barco enarbolar la bandera americana y salir de puerto del Realejo en virtud de la tal patente para navegar El comandante de Chinan– dega, un cubano llamado Golibard que había sido expulsado por Rivas porqUé rehuso abandonar a los americanos, se encontraba a bordo de la San José cuando ésta llego a San Juan del Sur. Creyendo Mor– ton poder engaiíar a las autoridades con la patente expedida por Giauffreau, no vacilo en entrar al puerto, y tanto él como Solazar se imaginaban que a la som– bla de la bandera americana podrían hacer un comer– cio lucrativo durante las hostilidades entre NicaraguQ y los otros Éstados .

Pero no hacia muchas horas que la San José esta– ba en el puerto cuando fue apre.sada por no tener bandera ni papeles en regla. El bOlco era de cons– truccion americana y habíd renunciado a la bandera de lós Estados Unidos pa~A tomar la de Costq Rica Aun cuando lo hubiesen reVendido a un cil!daqano americano, no podía recobrqr su calidad original sin una ley del congreso, Después de la coptura, Morton apelo al ministro de los Estados l¡nidos residente en Granada para que soltasen, el barco; pero Mr Wheeler estudio cuidadosdmente el caso, corivenci~ndose de que la goleta, lejos de tener d~recho a la proteccion de Iqs qutoridades qmericanas, hábíq cometido en realidaq un abuso al enarbolar la bandera de los Estados Uni· dos . Por consíguiE!nte Id San Jos~ fue coridilncida .PQr un tribúnal de presqs en ,el puerto de San .Juan, y hq– I)iendo . sido decomisad.a ~n favor del gobierno de Ni– c;arciguá, ;se la convlrtiC1 en

goleta de guerra bajo, la bandera de esta República:

La Granada se armo con dos carronadas de a seis y se la puso bajo el mandó del teniente Callender lrvine Poyssoux Este oficial éra oriundo de Misurí y había servido algún tiempo en la armadCl tejana a las

ordenes del comodoro Moore lo.mbién acompaño a\

• general Lopez en su expedicion a fa isla de Cuba en mayo de 1850, y en Cárdenas cantribuyo de modo esencial al feliz desembarco de la fuerza del vapor Creole, nadando hasta tierra con una cuerda entre los dientes, cuando había mucha dificultad para hacer atracar el barco al muelle. Sus grandes cualidades se pondrán de manifiesto más tarde, al relatar la historia de la goleta; basta por ahora decir que el sistema y el orden impuestos por él fueron tales que la Granada estuvo lista para prestar servicio en muy breve tiempo, Los soldados que de las diversas compañías del ejér" cito se destacaron para servir en la goleta, pronto es' tuvieron bien disciplinados por SU eficaz comandante,

. i. Sil.iling ietter. 'c'

59

Page 81 - RC_1966_09_N72

This is a SEO version of RC_1966_09_N72. Click here to view full version

« Previous Page Table of Contents Next Page »