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gua de las dos Repúblicas vecinas no ha si– do nunca bien determinada. Nos permitire– mos exponer el estado adual de la cuestion para cada una de ellas.

En lo que toca á Honduras, varios docu– mentos anliguos prueban que esle país, en la cosía del A1:lánfico, ferminaba en el Cabo Carnaron. Una capiiulacion hecha con el Rey de España por Diego Gutiérrez, fecha 29 d<:1

Noviembre de 1540 tI), para (;onquistar lo que ahora es la JVlosquiiia, lo dice terminan– temente. Ademas hemos visio, en nues1ro resúmen histórico, que toda la comarca com– prendida entre el rio Tinto y el rio Coco fué conquistada por Rojas, teniente del goberna– dor de Nicaragua, á nombre de quien fundó la ciudad de Natividad, en el cabo de Gra– cias á Dios y dió el nombre de laguna de Cartago, á la de Caratasca. Sin elnbargo Jua– rros, en ,su geografía del Reino de Guatema– la Bom. 1, pág. 44) (2) dice que la Provin– cia de Honduras está limilada al E. y S. E. por la de Nicaragua, y pág. 45, afmde que el úl– timo· de los rios de Honduras en la costa del Norie es el rio de los Plátanos; y se sabe por todos los mapas antiguos y n'lodernos que es el notnbre de un rio pequeño que corre al mar entre el do Negro (Blackriverl y el rio Patuca. De modo que Honduras se 'hubiera e,xtendido á lo Inas hasia el rio Paiuca. El tnismo J1.lan-OS hablando de la costa del Pa– cífico dice que Honduras no pasa en la bahía de Ponseca Inas allá de la boca del rio Cho– luteca, y iodos los documentos eslán ±ambien de acuerdo con él en aquel punio. De modo que', á fal±a de umi descripcion de la pari~

inferior de la línea divisoria cuyas estrenu– dades conocernos,· se puede decir que "legal– menre", la frontera entre Nicaragua y Hon– duras, seria la línea reda firada de la embo– cadura del rio Pa±uca en el Atlántico, á la embocadura del rio de Choluteca en el Pací–

fide. Se acercaria :mucho á esta línea recla

un" limite que siguiera el curso del rio Pa1u.~

08; aguas li'\.rriba hasta su fuenie, y del airo lado el CUl'SO del rio de Choluieca ~guas aba~

jo hasta su fuenfe, y del otro lado el curso del río de Choluleca aguas abajo hasta la bahía de Fonseca.

Pero con el trascurso de los tiempos y por la imperfeccion de los mapas an±iguos

13), ha sucedido que varias poblaciones Se han formado al Sur de dicha division, y han pertenecido siempre á la jurisdiccion de Hon– duras Iv. g. el Depto. de Olancho). Es precí-

(1) Sevilla: A1Chivo genelal de Indias - Dcpaltnmento del Pelú. - RegistlOs de VClagua - Papeles oficiales 1 to– mo manusclito años 1534 á 1628), pág 38.

(2) Compendio de la Histolia de la ciudad de Guatemala 2 tomos Guatemala, 1820

(3) Se encontlm'á al fin de este tomo, en la "Biblioglafía", la lista la mas completa de todos los mapas, antiguos y

modernos, de CentlO-Amélica en general y Nicalagua en

palticular. .

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so pues que una cO:nUsion tnix±a de las dos repúblicas colindantes defermine los mojo_ nes de la frontera defini±iva.

U1±irnatnenje esta cOlnision ha sido nOm~

brada y se ha ocupado de arreglar la cues– Hon. Nical"agua reclamaba los derechos qUe acabamos de exponer; Honduras por el COn– trario, pedía que el límlle, en el declive del Atlániico, fuese el rio Coco en lada S1.1 exten_ sion, y por el lado del Pacífico, el rio Negro. No se negaba, por parie de Honduras, que la extremidad orienial de esla república fUese anfiguamente al cabo Can1aron, pero decían: que, desde el cabo Cmnaron hasta Boca del Toro (al Sur de Costaríca), iodo el país com– prendido entre la costa '{ la cordillera habia sido nunca propiedad eiecfiva de los Españo– leo, sino de los indígenas independientes; que estos indígenas habian estado mucho 1iem~

po bajo el profecforado inglés, y que, el dia que Inglaterra habia renunciado á dicho pro– tec1orado, se habia entendido que, á cada una ele las repúblicas de Cos±arica, Nicara– gua y Honduras, ]e correspondia una ciería parle de la costa de Mosquitos, salva la obE– gacion de dal' á los indígenas ladas las ga– ranlías deseables; que entre el cabo Canl.a– ron y el río San Juan se habia siempre de– signado el territorio de los indígenas Íl'lde– pendientes por los nOlnbres de Taguzgalpa y Tologalpa; que siempre se habia entendi~

do, en los documentos de la antigua capita. nía general (1), que la Taguzgalpa corres– pondia á la Provincia de Honduras, y la To– logalpa á la de Nicaragua; y que en fin, Vas– quez dice muy claramente (2) que la Tolo– galpa es:l:á dividida de la Toguzgalpa por el rio Yare ó de Segovia (Coco).

Se ofrecían adetnas dificul±ades por el lado del Pacífico en el cual habia pueblos considerados como hondureños; y sii'l em– bargo, esfablecidos sobre ieil"enos que, de fo– dos tnodos, no podian pertenecer á olra ju– risdiccion que la de Nicaragua.

La coinision Hondureña - Nicaragüense ha creído resolver todas las dificul±ades pro– poniendo la fronfera siguienle:

La línea divisoria empezará en la bahía de Fonseca, sobre el paralelo 13 9 3' que coin– cide con Atnatillo, en las márgenes del rio Negro; seguirá despues dicho rio hasta su confluencia con el GUBsaüle hasta su con– fluencia con la Quebrada Torondano y el To– rondana hasta su cabecera; y de allí sobre la cima de la cordillera principal hasta el pun– to donde se desprende la cordillera de Dipil–

10. Seguirá esía cordillera que corre al Nor– deste hasta perderse en las llanuras del Atlán–

±leo y separa la hoya del rio Coco de la del

(1) Cédulas reales del 3 de oclubre de 1547, 31 de agosto de

1560 y 2 de julio de 1594; COllen e/I el AIChivo de GlIa– temuJa.

(2) Crónica de la Olden de San Flancisco (piovincia de Gua– temala). 2 tomos Guatemala, 1714·16.