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El día primero de Mayo está dedicado mundialmente a la celebración del Trabajo No del trabaja coma actividad sino del trabajo coma relación jurídica, resultado de la convención po, la cual un Individuo presta su actividad en favor de otro, que paga por dicha actividad y tiene la dirección de la obra Por eso, lo que en realidad se conmemora en este día, son las luchas de clase trabajadora para obtener las conquistas que en el orden social y jurídico han logrado, des– pués de innumerables e incalculables sacrificios, que de una manera forzada plasmaron en el Derecho Positivo, las normas jurídicas que actualmente regulan el trabajo subordinado

Cuando se escriba la historia del actual Derecho, sus cultivadores se encontrarán con la excepcional peculiaridad, de que las normas que regulan el habajo asalariado, no sufrieron el proceso evolutivo de los otras instituciones del Derecho Estas, no son más que la simple ade– cuación del Derecho vigente, a las nuevas formas de convivencia social, surgidas con posterio– ridad a su elaboración Las del Derecho del Trabajo, fueron impuestas por la aparición en el mundo social contemporáneo, de unas nucleaciones humanas en abierta contradicción con las leyes pI ecisamente promulgados para hacerlas impasibles y que subsistieran, se multiplicaron y aún se institucionalizaron, a pesar de lo acción represiva del Poder político, el cual tuvo que re– signarse primero, a tolerarlas -'-luego a suavizar y derogar sus más drásticas prohibiciones, para reglamentar unas actividades colectivas que resultaban a lo vez peligrosas y práeticam~nte

incoercibles- y por último, a forjar por medio de sus órganos, un estatuto jurídico propio paro el sindicato, cuyo desenvolvimiento doctrinIJl dió lugar O lo aparición de una nueva especialidad en los estudios jurídicos, que han tomado los sucesivos nombres de Derecho Industrial, De,echo Obrero, Derecho Social, Derecho Nuevo, Derecho Laboral, etc, y finalmente Derecho del Trabajo, que es el más aceptado por todos los tratadistas

les, políticas y económic<;Is que vienen modificando nuestra mundo, desde principios del sigla XIX

El triunfo de los principios del liberalismo económico, que proclamó una libertad puramen– te teórica y que constituyó el germen de una marcada desigualdad económica, la introducción en la vida social y política de nuevos contingentes humanos que formaron una clase desposeída y sujeta a las fluctuaciones y caprichos del capital, la transformación radical de la industria, como consecuencia de la aparición y perfeccionamienta de la máquina, y la consagración por el legislador del principio absoluto de la libertad de contratación, trajeron una evidente explotación del ser humano que debía poner su actividad de trabajo al servicio del capitalísta que dirigía lo

de trabajo, que cualesquiera que fueran, debían de ser aceptadas por los obreras, so pena de pe– recer de hambre con sus familias

Todos estos factores surgidos de la Revolución Francesa y de los descubrimientos cientí– ficos, dieron como fruto uno sociedad caracterizada por un profundo desequilibrio de sus clases extremas una poderosa y dirigente, en cuyas manos estaba no solo el capital capaz de mover la industria, sino también una excesiva preponderancia política y social, y otra, indigente, poco evolucionada culturalmente, cuyo úhico valor económico radicaba en sus fuerzas físicas, que ne– cesariamente debía aceptar las condiciones que la otra le ofrecía, poro obtener su sustento y sin

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