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han revivido, y que él trata de satisfacerlos, ocultán– dolos bajo una capa de fingida amistad Tengo da– toS para creer que ciertas insinuaciones que le has he– cho de que se ponga de acuerdo conmigo en ciertos puntos muy subalternos le han servido como arma para 01'1 Enrique Guzmán y Dn Faustino Arellano, que son sus inspiradores, para que ellos me exhiban como hom– bre falso, suponiéndome de acuerdo con vos para la expulsión de los Jesuitas y contemporizando con el sen– timientO del pueblo Yo estoy dispuesto a defenderme sin contemplación ni paños tibios, porque se me reputa jefe de un partido, y éste me impone deberes impres" cindibles tu administración pasq y el partido queda" En efecto, Guzmán, con el seudónimo de Fra-Diá–

volo erwió una correspondencia a El Termómetro, pe" riódico rasical que dirigía en Rivas don José Dolores G6mez En ella afirmaba qUe don Pedro Joaquin Cha– morro era el dutor del acta municipal llamada acta de

Judn Vega, cuyo arlí'culo primero reza así,

"1 Q- Los infrascritos, teniendo la mayor con– fianza en la prudencia del Supremo Gobiemo para con– trarrestar cualquier tentatiVa que tienda a alterar la poz pública, acuerdan ofrecerle su apoyo morol y ma-

teríal en cumplimiento de los deberes en que se halla constituido, sancionando desde ahora las medidas que

dicte con tal objeto"

Para defender al jefe del conservatismo de estos cargos, aparece en El Centro Americano (NQ 26 del año

¡ 881) un extenso articulo documentado en el cual se prueba que la actitud del señor Chamorro desde 1872 un año después de lo llegada de los Jesuitas a Nicara~

gua, fue adversa a la expulsión

La verdad respecto del acta de Juan Vega, aclara la defensa, es que cuando don Pedro supo de ella, ya estaba escrita y se negó a firmarla, porque no podía aprobar la medida que combatía Y dijo estas pa–

labras _uPar respeto a mí mismo no firmaría un

documellto de esta especie me rebajaría aun a los ojos del mismo Zavala COIl semejallte acto, aprobando de antemano lo que él haga"

El mismo Prefecto de Granada, don Roberto La– cayo, preguntado sobre el fundamento de la afirma– ción de Guzmán, contestó que no habla ninguno, y que era falso lo asegurado por Fra-Diávolo, pUes nadie había dicho que dOh Pedro hubiese sugerido el acta llamada de Juan Vega (1)

43 -' Se discute la actitud de Guzmán en la

"Cuestión Jesuitas" (1883)

Don Fobia Carnevalini, amigo de Guzmán y direc– tor de El Porvenir, le echa en cara que sus escritos de 1881 a favor de los Jesuitas fueron pura comedia.

Guzmán contesta en El Ferrocarril (NQ ¡ 2 año 2, 1883)' "No representé yo comedio ninguna en 1881, cuando la expulsión de los Jesuítas Condené con to– da franqueza uno medida qlle no poreda justa ni con– veniente Exponiéndome a desagradar seriamente a personas que estimo en alto grado, y colocándome en

abierta oposición con casi todos mis amigos, pero con–

secuente con mis principios y obedeciendo a los dictados de mi conciencía, desaprobé la expulsión de íos padres de la Compañía de Jesús, y la desapruebo todavía". A su vez don Fobia, desde las columnas de su

periódico, contesta así a Guzmán

"¡ No representaste ninguna comedia en 1881 cuando la expulsión de los Jesuitas!

"Vaya! Esto puedes contarlo a los olvidadizOS que no te conocen

"Te gustaba y muy mucho Recuerdo que más de una vez me dijiste aquí en Granada -¿Qué hace Zavala que no los expulsa? Y agregabas -Bah! Na quiere el Cacho

"Y dime, ¿no fuiste de los diputados que en el Congreso aprobaron la conducta del Gral Zavala a ese respecto?

"Si desaprobaste la expulsión antes, para obede-

(1) La justificación del señor Chamarra ndaulre mayor valor si Be atiende

a -que en las post"l'imerías de su vida pCJ:sistió en n~gar que hubiese sido fautor de la expulsIón de lo!! Jesuitas. En su testamento, otor~

gada tres días anteS de morir, dejó 1a siguiente decInraciótt: "Como

110 sólo mls propios _aetos han sido juzgados y cornentlldos, sino que

tal vez por exaltación del momento se ha llegado hasta atribuirme par– ticipación en medidas de nuestros (l'obernantes que produjeron excita– ción pública y 'reseqtimientos personaie/;l, debo declarar que fuí extra– ño a tales médidas, y que por el contTario. hice 108 rnayol'es> (,Sfuel'Zos Para evitarlas" Donde claramente .se refiere _a la "Cuestión Jellui–

tss" En la Biografía de D Pedro Joaquín Chamorro por Esteban Escobar se trata por ek.tenso este asunto con numerosos documentos

cer a los dictados de tu conciencia, ¿cómo flle que la deseabas en privado y la aprobabas en el Congreso? "Hiciste más. Queriendo nombrarte el Presiden– te de la Cámara en la Comisión para dictaminar en el

asunto, manifestaste qLle no convenía, porque apare– cerías en contradicción con tus principios antes expre~

sodas (entre otro_s, en un artículo del Padre Cabos que tuvo el honor ele ser leido en los púlpitos y aún de que se le rindiese culto entre velas encendidas!), pero en– seguida, tomaste a tu cargo la redacción del dictamen que propohe la rectificación de la iniciativa del Senado en la cual se declaraban simplemente "legales los ac– tos del Poder Ejecutivo con que habia dado cuenta el Presidente de la República en su Mensaje de 24 de

Enero de ese año"

"En dónde guardas coherencia en ese dictamen con los dictados de tu conciencia, es en esquivar el bul–

to, cuidando estudiadamente de no mencionar a los JesuItas, pero las palabras que te cito a continuación subrayándolas, mahifiestan de un modo inequívoco tu aprobación y aun satisfacción relativamente a la me– dida tornada contra ellos por el Gobierno "!as altísi– mas consideraciones de partido" sobre que pasó el Gral.

Zavala, "los estrechos vínculos que rompía"; y fIla

página inmortal que aseguraba para su nombre" Es– tas frases no podian salir de tu refinada pluma para ensalzar en' el Gobernante las victorias sobre los indios bisoños de Matagalpa y los montoneros de León, obte– nidas por subalternos suyos, sino por haber tenido el valor, verdaderamente grande para estos poises, de ex– pulsar a los hijos de Loyola"

"Es que, en realidad, fuiste entusiasta por esa medida, coma <;le toda otra que forme parte del credo del partido a que perteneces, en política o en religión, por violenta que sea, pero como conoces por donde cojean las masds, te agrada que esto sea hecho por el

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