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masen las Repúblicas de Centroamérica un Tratado que garantizase la paz, insinuando que la gestión apareciese "como pensamiento espontáneo emanado del Gabinete Norteame– ricano", e indicando además al Señor Corea que "este trabajo no lo percibiesen los miem– bros del Cuérpo Diplomático residente en Washington" ?

3 Dónde estábais vosotros el "17 de sep– tiembre de 1907" cuando se firmó por los cinco Ministros de Centroamérica en Washington el Protocolo preliminar para una Conferenda de Paz de los cinco Estados, que se verificó Inás tarde y en el cual las partes interesadas se obligaron a someter las diferencias que sur– gieran entre ellos; antes de reunirse la Confe– rencia, "a los buenos consejos" de los Presiden– tes de Estados Unidos o de México, o de ambos conjuntamente?

4 Dónde estábais en "diciembre de 1907" cuando el Secretario de Estado, Mr. Root, en tono solemne, dijio a los Delegados de Centro– américa reunidos en conferencia, entre los que se contaban los Doctores Luis F. Corea, JOS6 Madriz y Policarpo Bonilla sin que hubiera ninguna protesta de parte de ellos: "Vosotros estáis acostumbrados a escribir vuestros pac– tos en papel mojado; esta vez no sucederá así",

y qué culpa tenemos los cOnservadores de que el papel haya resultado más resistente de lo que esperaban quizá los firmantes, y que, esa resistencia haya durado hasta la hora de aho– ra?

5 Dónde estábais cuando el extranj~ro

Ruchanan, digo extranjero para usar el len– guaje liberal del día, mejor dicho, el Represen– tantes de los Estados Unidos, Mr. William K.

Buchanan, se sentó a presidir la inauguración de la Corte de Cartago junto con el Embaja– dor de México, don Enrique C. Creel, no obs– tante que se trataba de una Corte de Justicia puramente centroamericana?

6 Dónde estábais cuando el Presidente

A PROPOSITO DE LA NO SUPERVIGILANCIA ELECTORAL

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y EL CRIMEN DE LESA PATRIA

Refiriéndome a la intervención de los Estados Unidos en los asuntos internos de Nicaragua, diré que esa intervención es obra exclusiva de los hombres del liberalismo; y que cuando el Partido Conservador llegó al Poder, lo encontró ya todo hecho. Para com– probarlo, presentaré documentos incontesta– bles, cuya autenticidad no podrán nunca des– conocer los mismos contrarios que nos acusan de lo que ellos llaman el "crimen de lesa pa– tria".

En la Historia Sagrada se cuenta que que– riendo Dios probar la paciencia de Job, le en–

v~ó toda clase de tribulaciones, y como en me– dio de sus sufrimientos eleváse sus quejas al Altísimo, contesta la voz de Dios en el libro de Job: "Dónde estabas tú cuando puse la pea– na en que descansan los mundos?".

Revisando los documentos que evidencian el interés que en sus reiteradas gestiones han mostrado los liberales para obtener, de parte de los Estados Unidos, una intervención en nuestros asuntos, no sólo diplomática, sino ar– mada, ocurre preguntar:

1 Dónde estábais vosotros los que hoy calificáis como crimen de lesa patria la in– fluencia amistosa de los Estados Unidos en nuestra política, el 4 de abril de 1903, cuan– do don Fernando Sánchez, Secl'etario de Rela– ciones Exteriores del Gobierno Liberal del Ge– neral J. Santos Zelaya, solicitó de los Estados Unidos, por medio del Doctor Luis F. Corea, Ministro en Washington, que promoviese una reunión de plenipotenciarios centroamericanos para pacificar a Honduras y terminar el ma– lestar y desconfianza entre los pueblos y Go– biernos de estas secciones, declarando categó–

~icamente el propio Ministro Sánchez que "la mtervención de Washington sería eficaz"? 2 Dónde estábais vosotros los liberales el 8 de abril del mismo año, cuando el sobredi– cho Ministro Sánchez insistió en la celebra– ción de la Conferencia referida, para que fir-

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DIEGO MANUEL CHAMORRO

Ex-Presidente de Nicaragua