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da que domina la ciudad y El Danubio a muy

larga dis1ancia

ITALIA

Así que concluí iodos mis CUrs06 en Viena, decidí un viaje por Dalia Salí de Viena para el único puedo austriaco: Triesl:e Visifé el Castillo imperial "Mirarnar" construido por el Archiduque de Ausiriu, Maxirniliano, más farde Emperador de México Tiene un hannoso par– que y una gran colección de anfigüedades es– pecialmente de origen Mexícanas. Seguí a la poética Venecia donde me encontré en una gran fiesta nociuxna en los grandes canales y que concluía en El Lido, tornando parlicipación mi· les de góndolas muy bien ilwninadas y 11evan~

do casi todas ellas familias y músicos y canto– res VisiJé el Palacio de los Dux, la iglesia San Marcos y su plaza llena de palomas. Pasé

después a Padus. donde aprendí del misIno Bassini su método de operación para la cura radical de la hernia inguinal Lo ví operar va– rios casos, con gran habilidad y con nlucho cuidado en Su disección

Tomé el fren para la ciudad de Florencia, donde nació Danie, el lTIás grande de los poetas italianos La artística y bella Florencia, con sus hermosísimos palacios y ricos museos. Se–

guí para. ROMA. Dediqué ires semanas a visifar los Hospitales en la mañana, y la tarde la dadi– cabe'\ a visitar todo lo posible de ver, d6niro de ese corto tiempo, de la moderna y antigua Ro– ma Viaié la Campiña Romana, foco de la ma– laria y de muerle por tantos siglos hasta que el genio de Mussoliní, después de la guerra mun– dial, mandó a desecar ese enorme pantano, sanearlo y convertido en un terreno rico para la agricultura y propio para fundar ciudades Visité muchas veces El Vaficano, pero no pude ver a Su Santidad León XIII, porque en ese tiempo exigían Jll.uchos requisifos, corno pasa– parles, traje de etiqueta, recomendnciones diplo– máticas, que yo no tenía tiempo para llenar. Tuve la oportunidad de asistir a las conferen. cías Marchiafava y Celli, de Golgi y Tommasi Crudeli, sobre el descubrinrienio del Hemato– zoario del Paludismo hecho por Laverán en 1880 Asistí varías veces al Hospilal de Muje~

res con gran servicio para parlos Visilé tam– bién el Hospital del Sanio Espírifu dividido en ires Departamentos: Hospital General, Asilo de Locos y Asilo de Niños, con total de 4 500 camas Al otro lado de la calle visilé el Hospital Milüar En ambos ví varias operaciones de cirugía ma– yor, practicadas con limpieza y destreza

NAPOLES

Torné el ren para Nápoles Visité 10 más in4 teresanie de esía grande, bulliciosa y sucia ciu– 9-sd. El barrio de Sania Lucía, en la noche Y

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muy de lllañana, era de verse el enon"l"l.e ganito bullicioso y original que llevaba sus artículos al mercado general

Visité la isla de Capri, lo. famosa Gruta azul Las ruinas de las ciudades desenterradas de Pompeya y Herculano y subí a pie el Vesubio Visilé el Hospital Internacional colocado en un lugar lTlUY pintoresco y el Hospüal Tedesco

Es~os Hospitales presentaban 'Un aspedo muy disti.nlo a. los Hoieles y casas de la ciudad por su csxnerado aseo La~ salas de los hospitales bien ventiladas y asoleadas Mucho Paludismo y

tifoidea. Ví algunas operaciones pradicadas bajo la asepsia y la antisepsia con mucha ha– bilidad y disciplina en los asisienies Visilé el Teatro San Carlos, el más grande de llalia..

PISA

Me dirigí a Pisa donde visüé la Cafedral, la Torre ill.clinada La Sapienza o Universidad fundada en 1542, y el Hospital con casos de me· dieina y cirugía tnezc1ados en la misma sala Muy poca higiene Ahora he sabido que el Hospital esiá completamente modernizado y su servicio es de lo mejor.

Pasé El. la bella ciudad de Milán con Su famo– sa Catedral que es una joya de arquíteciura. Sus preciosas Galerías En el Monasterio de Santa María de la Gracia, vi la célebre Uliima Cena pintada al óleo, en una pared, por Leo.. nardo de Vinci

Visilé el Hospital Mayor, uno de los Hospilél.– les más grandes que he visio en mi viaje, fuera del Hospilal General Real e Imperial de Viena Muy artístico, bien ventilado y asolead.o, mucho aseo Presencié varias operaciones de Cirugía Ceneral y abdominal bajo el sistema aséptico y

antiséptico Visité el Teatro dé la Seala. que después del Teatro San Carlos ,de Nápoles, es el más grande de Italia.

GENOVA

Me irasladé a Génova por el tren Cerca de la estación se ve el soberbio Monuxnenfo a Co– lón Visilé el Palacio Municipal donde se guar– g6n l.m sinnúmero de documentos relacionados con Colón y el descubrimiento do América el Palacio Doria obsequiado en 1522 a Ándrea Do– ria, Padre de la pa±ria El mundialmente fa– moso Cemenferio donde se admiran infinidad de soberbios panteones en mármol Visilé el Hospital Protestante y el Palacio de la Univer– sidad

NIZA

Salí p9:ra Niza donde admiré su bellisimo pa– seo de las palmeras y el ~istocrático paseo de los ingleses Por su clima suava llegan de to– das partes del mundo aqUéllas 'personas deli-