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Casi todos los cuentos de Silva son ttes veces vi– vidos cuando sucedieron, cuando se escribieron y

El lenguaje nicaragüense de Silva no es retórica, sino lengua

Es lengua vivo y natural

La técnica de Silva es tan funcional, tan so/a–

mente para lo que tiene que hacer, que en cuanto Jo hace, desaparece No queda nada de el/a

Con los mate, ioles de lo que se l/ama literatura regional casi todos han fracasado .nor falta de mesura Generalmente se han excedido Silva, con eso mis–

mo, hace obra de orle, no solarfl.ente porque es autén– tico, sino también po/que sabe hasta dónde /legar Y casi nunca se sobrepaso

"Fíjense bien, cómo digo misr'?o, /la está diciendo esto!"

Cuando Silva estudiaba en San Salvador debió de leel o Salan ué Le bastó con un grano ne sol en lo [Junio de Ja lengua Cuando estudiaba en León, taJ \'ez hayo leído 105 cuentos legionales que, sin darles maYal imlJortancia, escribía Mariano Fial/os Es posi– ble que haya pensado etit9nces cómo deben hacerse esa clase de cuentos Pero los suyos son vividos y

Siempre he lenido la sospecha de que los indios americanos formalOll sus lenguas imitando a las pája–

'os Yo conocí a una india que hablaba exactamente como un o!caraván

La infancia es pOlo Si/vo su verdadera vacación,

El indio de Bono en la Sangre y el niño de los cuclllos, posiblemente simbolicen, palO Silva', el gran miste, ia de la infancia

Un cuento de Silva no se relata, sucede

Silva remeda sin malicia, con humol y ternura

El Comandante es el hombre visto por el niño

T odas los cuentos de Silva 001 eeen contados, mejOI dicho, contados por pójOJos No por un pójaro solo, sino

.001 muchos pájOlos diferentes Son los to– nos y acentos indígenas de su ie/joma nicaragüense

personajes de su leperto/io, para saber que un cuento

suyo es Silva remedando a la naturaleza

El que pierde su infancia nunca madura

Leo esta f/ ase en un artículo de MireiJIe Latil -–

Le Dantec sobre Villiers de L'lsle P.dam 10ngoge des oiseoux (symbo/e de la langue des dieux et des onges, eelle de poete) La lengua de los pájaras es la lengua de los poetas También la lengua de los niños Para Silva, está e/m o, la lengua de los pájaros en

que escribe sus cuentos, es el lenguaje de su infancia, más bien el de Jo infcmcia nicaragüense, que está en

Por lo menos media docena de cuentos de Silva

me gustan tanto o más que los o, imeros CLlentos de cazo j' pesca de Hemmingwoy, los que tenian por es–

cenal io los bosques y lagos de Michigan Aunque absolutamente difelentes en todo lo demás, se me po–

I ecen en su gran desnudez Y en su fidelidad a una ex– periencia maravillosa yola vez totalmente ordinaria -o más bien a la inversa, una experiencia totalmente oldinf'JIia y sin embargo maravilloso

Silva escribe como ninguno la lengua nicaragüen se .oorque, como hace el pueblo, la inventa éJ mismo

El lenguaje de Silva, con todo y ser enteramento nícaragLÍcnse, no t¡ata de {famar la atención sobre sí

Cuando a Silva le dicen -como le han dicho–

s; se CI ee un esc, itol como Shakespeare o el Dante O

Cervantes y él contesta que sí, que es efectivamente

un escritor como esos, no soiamente lo dice riéndose sino que, desde fuego, lo cree riéndose Y no son po– cos, ni insignificantes los aspect9s en que tiene razón

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