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Decano . . . .. Dr. Arturo Gurdián. Vice-Decano . Dr. Nicolás Buitrago h. Vocales Dr. J. Rubén Berríos. " .. . " Dr. Heliodoro Arana. " Dr. Manuel Tijerino. " Dr. And,rés Ran1irez Sacasa. SecretalÍo.. . Dr. Noel Ernesto Palleis. Vice-Secrefario Dr. Vicente Navas A.

El 16 de Enero de este mismo año de 1928 fui llamado al desempeño de las Cá tedras de Código Civil 39 Curso, Crimino.. logía y Código de Minería; y por acuerdo de 14 de Abril del mismo 1928 del Presi– dente don Adolfo Díaz y del Minisferio de Instrucción Pública don Francisco Reñaz.. ca, fui nombrado Vice-Decano de la Fa– cultad de Derecho y Notariado, organiza– da así,

En el mismo año, el 12 de Octubre de 1918, fue 'colocado su retrato en el Para_ ninfo de la Universidad, en 'un acto que revistió una gran suntuosidad. Al demos_ trar yo mi gratitud para las Facultades que acordaron ese homenaje, de mis pa– labras de gratitud, dije éstas,

"Ya padre mío, estás ocupando el lu– gar que con tus relevantes viriudes supis_ tes conquistar; desde ahí verás desfilar

uno a uno a los que, CO~ tu voz uesintere_

sada les indicabas sien1p' e el derrotero del honor. El oioño de nlÍeses de la ve– neración levanta hoy el dorado Íl uta de sus dádivas, y tú que fuisle corno el fir– mamento de la mañana por la bondad de tu alma, recoge esie homenaje y reeí– belo como la oÍl enda más elocuente de reconocin1iento a tu labor de constante abnegación, y lén seguro que yo, reflejo fuga.z de la llama que en tu cereb.o ardía, centmela alerta de lu nombre, eco peren– ne de lu corazón, sabré agradecer este aeto y gravarlo con letras indelebles en

10 más recóndito de mi alma".

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En Decreto de 2 de Abril de 1941 se fundó en la ciudad de Managua, la Fa– cultad de Ciencias Físícas y Matemáticas, corno parte integrante de la .Universidad de León. Su fin por el momento es la formación de Ingenieros Civiles. Tiene en proyecto la apertura de la Escuela de Al" quitectura.

Tanto su fundaci6n con10 su mante– nimiento y adelanto se debe al inolvida– ble Ingeniero don Julio Padilla Méndez, quien fue su primer Decano.

Por encontrarse fuera de la sede de la Universidad, tiene su propio local, bi– blioteca, laboratorios y personal adminis– trativo.

El Ing. Padilla ejerció el Decanato por

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cutivo fui nombrado Vocal <.le la Junta Directiva de la Facultad de Derecho y No– tariado de esta Universidad, nombramien– io que recibí también en Enero de 1927.

Este año en 7 de Enero, hizo desava· recer del .adiante escenario de la Unive.– sidad, la vida de uno de los Maestros que le dio renombre y prestigio verdadero, el

DI. Nicolás Buitrago Buitrago.

Mi calidad de hijo suyo me hace ce– der corno se debe, la palabra a los que supieron conocerlo,

'·Perienecía este varón augusl0 B la

pléyade de hombres eminentes que res– pondieron a los nombres de Larreinaga, Juárez, Zepeda, Salinas y otros tantos sa– bios que a su paso por este mundo, han dejado impresa con caracieres imborra– bles la huella diamantina de su espíritu, al plasmarse en la Cátedra por la fuerza de sus doctrinas en el alma de varias ge· neraciones". (El Centroamericano'.

"Cuando los sucesos sangrientos del 13 de Noviembre de 1913 que serán pOl siempre una de las cosas inolvidables de este pueblo en su víacrucis que le han hecho sufrir, el Dr. Buitrago que ejerció la Magistratura de la Corte de Apelacio– nes de Occidenie, con los doctores Alfonso Ay6n y Félix Quiñónez, elevó su renUlwia irrevocable corno una forma de su pli,– testa por aquellos asesinatos, 'y a pesar de las gestiones para que la retirara, la mantuvo y no volvió a la Corte". (El Cro– nista) .

"Con el fallecimiento del Dr. Buitra– go, el país pierde a uno de 10i¡ más emi– nentes profesionales de la época, y la ju– ventud a un abnegado y sabio Maestro, que por muchos años difundió €lloro de su inteligencia, con el desinterés y el ar– dor de un verdadero Apóstol". IEl Eco Na– cional) .

La Universidad, el Colegio de Aboga– dos, las Sociedades de estudiantes, todos, le hicieron homenaje fúnebre en el Salón de actos públicos. El Dr. Juan de Dios Va– negas, dijo, "Aquel soberano de la Juris– prudencia que tenía su órbita lun1inosa en nuestros Tribunales; aquel enseñador incomparable que resplandecía en la Cá– tedra, desaparece para siempre. Una ri· queza nuestra se acaba, se desvanece de– jando un reguero de luz en el espacio".-,– El Dr. J. Venancio Berríos en nombre del Colegio de Abogados, el Br. entor>ces don Leopoldo Argiiello Gil, por la Spciedad ju. rídica "Larreinaga"; todos deshojaron so– bre sus despojos humanos, las perfuma– das flores de su admiración y '~fecto.

Año de 1928.