10. El PLC elige candidato para el 2001

En medio del trastorno político, social, económico y moral que existía en la nación en el año 2000, Enrique Bolaños-Geyer evaluó la posibilidad de aspirar al cargo de presidente de la República en la contienda electoral del año 2001, convencido de que el que no gobierna para servir, no sirve para gobernar. Sabía que el país necesitaba una gestión austera, honesta encaminada a la modernidad del Estado al servicio del ciudadano para que pueda llegar a vivir con dignidad. Además buscaba el rescate del lastimado PLC.


En las filas del PLC ya se mencionaban cuatro precandidatos al cargo de presidente de la República cuando Enrique Bolaños entró a ser el quinto aspirante:

El doctor Iván Escobar Fornos, presidente de la Asamblea Nacional, amigo muy cercano del doctor Alemán a quien se consideraba ser el ungido por Alemán.

El licenciado Eduardo Montealegre Rivas, acaudalado banquero que se había iniciado en la política recientemente como secretario de la Presidencia de Alemán y después como su Canciller.

El doctor José Rizo Castellón, presidente del Instituto de Fomento Municipal (INIFOM) en el gobierno de Alemán, quien fue alto funcionario de la Alcaldía cuando Alemán fue alcalde de Managua y lo acompañó en la tarea de organizar el PLC. Rizo oficializó su precandidatura el 5 de enero de 2000 haciendo un llamado para democratizar el partido permitiendo el voto libre a los convencionales y diciendo que él no es el ungido y que el candidato que goza de toda la simpatía del presidente Alemán en el doctor Iván Escobar.1

El ingeniero David Robleto, ministro de Cooperación Externa en el gobierno de Alemán, quien fue considerado como el aspirante más débil.

El ingeniero Enrique Bolaños-Geyer, quien nunca había militado en partido político dedicado solamente a sus empresas agrícola-industriales, se inició muy activamente en asuntos nacionales en 1978 como miembro de instituciones del sector privado: Asociación de Algodoneros de Oriente (ADADO), Instituto Nicaragüense de Desarrollo (INDE), y posteriormente en el COSEP donde llegó a su presidencia. Era el vicepresidente de Nicaragua durante la administración de Alemán, cargo al que renunció en octubre de 2000, para poder aspirar a la presidencia de la República.
Wilfredo Navarro también aspiraba a la candidatura presidencial, pero al final no lanzó su precandidatura quizás por haber sido derrotado por Herty Lewittes en las elecciones municipales de Managua del año 2000. ¿Se descalificó a sí mismo por esa derrota?

Los medios de comunicación y muchos analistas políticos coincidían en que el doctor Iván Escobar Fornos era el candidato ungido por el doctor Alemán.2



Base para estrategia de Bolaños


Enrique Bolaños y sus amigos asesores coincidían plenamente en que esta vez todo parecía indicar que Alemán tendría que escuchar el expresivo mensaje de descontento que enviaron las bases del PLC con la derrota en las elecciones municipales del año 2000, un año antes de las elecciones generales de 2001. Calculaban que esta vez Alemán se tendría que abstener de imponer al candidato de su beneficio personal, sino que tendría que proyectar una imagen democrática a lo interno del partido dejando que el candidato fuera escogido por las bases del PLC en un proceso democrático y transparente. Además, había que responder a las demandas de la opinión pública, porque una elección nacional no es posible ganarla solo con los votos del PLC y sus aliados.

El excanciller de Alemán, doctor Emilio Álvarez Montalván, lo señaló en un artículo de opinión que escribió para el diario La Prensa el 1 de enero de 2001, dos semanas antes de la convención del PLC en la que se escogería al candidato del partido:

La clave sin embargo y la última oportunidad para restaurar credibilidad la tiene el PLC en su próxima Convención Nacional que precisa ser modelo de la libertad, transparencia e igualdad, para que su candidato tenga legitimidad y respetabilidad. Las alianzas no son tan importantes para motivar al votante, porque éste ya no cree en ideologías ni en partidos, sino en personalidades confiables.3

 

Por otro lado, en el equipo de Bolaños también se creía que sería difícil que el PLC ganara las elecciones con Iván Escobar como candidato:

  1. Porque a pesar de ser Iván Escobar abogado constitucionalista muy capaz y de prestigio y que había sido presidente de la Asamblea Nacional por varios años, su imagen había sido considerablemente dañada por un acre artículo que el doctor León Núñez había publicado en el diario La Prensa del 23 de febrero de 2000, en el que lo catalogaba como “el pescuezo más flexible del liberalismo, el hombre que tenía la mayor capacidad de obediencia”.
  2. Porque el PLC acababa de sufrir una derrota en las elecciones municipales de 2000 en las que, de las 17 cabeceras departamentales (¡que son las importantes!), el PLC solo había ganado 5: Masaya, Jinotega, Boaco, Bluefields y Rivas; mientras que el FSLN había ganado 11: Managua, León, Matagalpa, Chinandega, Estelí, Puerto Cabezas, Juigalpa, Jinotepe, San Carlos, Ocotal y Somoto. El Partido Conservador, ganó la de Granada4. Porque, además, había fuertes cuestionamientos en los medios de comunicación y en la opinión pública sobre la corrupción del gobierno y de la gestión de Alemán, lo cual perjudicaba a todos los cinco aspirantes, pero de modo especial a Escobar por su estrecha amistad con Alemán y por su fiel conducción de las maniobras legislativas desde la presidencia de la Asamblea Nacional.
  3. Porque ya el mismo Alemán había reconocido el desgaste de su gobierno.
    El Nuevo Diario del 17 de noviembre de 2000 comentó que:

La victoria política electoral municipal del FSLN se convierte en un factor moralizador del sandinismo y de las fuerzas progresistas del país, porque constituye el primer éxito electoral después de 1990 y porque su actual repunte le abre altas posibilidades de ganar las presidenciales en el próximo año.

 

Con estas consideraciones, Bolaños se dedicó a recorrer el país en busca del voto de los convencionales del PLC quienes, en buena cantidad, lo conocían o al menos conocían de su gestión al frente del COSEP en la década de los años ochenta, cuando fue reconocido como el líder de la oposición a la dictadura sandinista, por lo que fue fuertemente castigado en 1985 por el sandinismo con la confiscación de todos sus bienes.

Bolaños hizo análisis de las fortalezas y debilidades de cada uno de sus contrincantes:

  • Que David Robleto Lang mostraba ser un candidato sin mucha fuerza.
  • Que José Rizo Castellón mostraba ser un candidato potencialmente fuerte, pero que muchos convencionales le manifestaban que no lo aceptarían como candidato a la presidencia de la República por temor a que lo inhibiera el CSE por posibles problemas con la recuperación de su ciudadanía cuando regresó de su exilio en Chile durante el régimen sandinista.
    A este respecto, El Nuevo Diario del lunes 8 de enero de 2001 reportó que:

… Rizo Castellón tiene bastante apoyo de los convencionales. Cuenta con el respaldo de una gran parte de los convencionales de León, Estelí, Jinotega, Chinandega y de algunos distritos de la capital. No obstante, señalan, los argumentos jurídicos serán devastadores contra el doctor Rizo debido a su supuesta doble nacionalidad, chilena y evidentemente, nicaragüense.

  • Que Iván Escobar Fornos resultaba ser preocupante porque era el escogido por Alemán y que su imagen había sido fuertemente dañada por el áspero artículo de León Núñez del año 2000 y que el fracaso electoral municipal de ese mismo año confirmaba el fuerte desgaste de Alemán, lo cual perjudicaba especialmente a Iván Escobar.
  • Que Eduardo Montealegre sería el candidato más fuerte a vencer: juventud, profesional, probidad y sobre todo capacidad financiera para la campaña. Él pasó la década de los años ochenta en el exilio en Estados Unidos y regresó a ocupar la gerencia del banco Bancentro del cual era accionista y después fue secretario de la Presidencia y Ministro de Relaciones Exteriores del presidente Alemán.

 

 

Restar competidor y sumarlo en alianza


Basado en este análisis, Bolaños decidió buscar una alianza electoral con Eduardo Montealegre a quien le ofreció la candidatura a la Vicepresidencia. Montealegre fortalecería la necesidad financiera de la campaña; su linaje liberal ayudaría mucho al rescate del PLC y su profesionalismo contribuiría en la modernización del Estado.

Como Montealegre no aceptó, entonces Bolaños buscó y logró la alianza con el doctor José Rizo como candidato a la Vicepresidencia. Le expuso al doctor Rizo que en caso que el partido lo postulara a la candidatura presidencial y que el CSE lo descalificara a medio camino de la contienda electoral, reponerlo conllevaría un riesgo electoralmente mortal. Por otro lado, reponer a un candidato a la vicepresidencia a medio camino, era un asunto molesto, pero superable. Si usted quiere ser algo en esta contienda, su mayor aspiración solo podría llevarlo a la vicepresidencia. Y Rizo aceptó.

Al finalizar el recorrido por todo Nicaragua (y Miami, también), Bolaños sabía que sus cálculos de ofertas de votos de los convencionales le daban cómoda mayoría para ganar la nominación siempre que no se produjese “el dedazo de Alemán” para Iván Escobar y más bien permitiera el libre voto de sus convencionales.

El Nuevo Diario del 8 de enero —6 días antes de la convención del PLC— con el titular “Alemán indeciso, teme lanzarse sin paracaídas” y reporta:

Bolaños, de eso no hay también la menor duda, ha cogido fuerza dentro del liberalismo y esa situación parece que ha puesto en “jaque” al Presidente, porque a pesar de que públicamente ha manifestado que don Enrique es un candidato de lujo, como los otros cuatro, incluyendo a Rizo, el ingeniero Bolaños se ha manejado como una persona independiente de los dictados del propio Presidente de la República.

Lo que faltaba era asegurarse de que la elección fuera limpia, que no hubiera “dedazo” y que el voto fuera secreto y transparente. ¡Y, así fue!
En entrevista dada a Enrique Bolaños Abaunza, hijo mayor del autor, el doctor Iván Escobar comentó sobre su contrincante y le dijo:


Él anduvo [don Enrique] por toda Nicaragua haciendo su campaña y tenía buen personal, y gente que lo apoyaba pero además, él es un hombre muy preparado, muy ordenado, y tenía un buen equipo técnico y él es hombre muy disciplinado, todo lo bien, al centavo todo, y eso le daba mucha penetración a don Enrique5.

En las votaciones de los convencionales del 14 de enero de 2001, que se llevaron a cabo en la hacienda El Chile de Arnoldo Alemán, la fórmula Bolaños-Rizo6 ganó por amplio margen la postulación a la candidatura presidencial y vicepresidencial, aprovechando el voto secreto que permitió la alta dirigencia del PLC.

La votación no fue a mano alzada, sino mediante el voto secreto depositado en ocho urnas plásticas transparentes, asignadas a más de un departamento del país cada una, ubicadas en los pasillos laterales del salón. En el siguiente cuadro se muestran los resultados.

 

Regiones

Masaya
Granada
Carazo
Rivas

Managua
Miami
I

Managua
Miami
II

Chinandega
León

Matagalpa
Jinotega

RAAN
RAAS

Madriz
Nueva Segovia
Estelí

Boaco Chontales Río Sn. Juan %
URNAS No. 1 2 3 4 5 6 7 8  
Bolaños 56,7%  49,2 58.6 42,9 35,6 70,8 76,6 67,3 54,6
Escobar 19,.4% 11,1 20.7 4,8 10,2 8,3 00 2,0 9,4
Montealegre 23,9% 39,7 20.7 52,4 54,2 20,8 23,4 30,6 35,5
Nulos                 0,5
SUMAN 67 63 29 63 59 24 47 49  
Las urnas 2 y 3 suman 92, compuestas de dos mitades de Managua y Miami

 

Los resultados de la votación son consistentes con el perfil de cada candidato. Bolaños, quien pasó toda la década del sandinismo en Nicaragua luchando desde el COSEP por la defensa de la democracia, era reconocido como tal, por buena parte de la población del país. Arrasó en 6 de las 8 casillas, mientras que Montealegre, que quedó en segundo lugar, y no era tan reconocido por la masa votante como lo era Bolaños, solo ganó en las casillas 4 y 5 (Chinandega-León y Matagalpa-Jinotega), en parte porque él es chinandegano y su candidato a vicepresidente era el gran líder liberal matagalpino, Jaime Cuadra.

 

 

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1 El Nuevo Diario, Rizo lucha contra el ungido, 6 de diciembre de 2000.

2 La Prensa, No soy el ungido, 27-11-2000; Elección de candidatos presidenciales, 10-12-2000; Consulta anónima da triunfo a Iván Escobar Fornos, 28-12-2000; Panorama electoral y desafíos del PLC, 11-01,2001.

3 La Prensa, Panorama pre electoral y desafíos del PLC, 1 de enero de 2001, sección de Opinión.

4 La Prensa, FSLN logró 11 de 17 cabeceras departamentales, 28 de noviembre de 2000.

5 Entrevista de Iván Escobar. Grabación original de sonido, archivada en Fundación Enrique Bolaños.

6 N del A - La fórmula Bolaños-Rizo posteriormente también fue ratificada por otra gran convención del PLC el 28 de enero de 2001, en el Centro de Convenciones Olof Palme.